Los futbolistas de la peña celebran un tanto esta temporada. | Marco Torres

Las cifras en el mundo del fútbol son meros datos estadísticos, números que no garantizan resultados y que únicamente sirven para atestiguar o dar fe de un periodo de tiempo determinado. Muchos tiran de las estadísticas para defender sus intereses y lanzar una advertencia a su oponente; otros las deshechan afirmando que están para romperlas. Pero hay guarismos que sí precisan un análisis y que son determinantes, puesto que constatan un realidad.
La Peña Deportiva alcanzará este domingo en la duodécima jornada de liga frente al Mercadal (Municipal de Santa Eulària, 12,00 horas), la nada desdeñable cifra de 175 días sin perder; 25 semanas invicto; más de cinco meses puntuando.
La última derrota del equipo de Luis Rueda en un partido oficial se produjo en Almería (2-1) en el encuentro de ida de la primera eliminatoria de ascenso a Segunda División B. Teniendo en cuenta los meses de verano, la Peña suma 12 encuentros oficiales consecutivos -sumando el de vuelta frente al Almería- sin perder, que se extienden a 21 si añadimos los amistosos de pretemporada.
Pero estos dígitos no son nada si atendemos a los partidos disputados por la Peña como local. El Municipal de Santa Eulària lleva más de 400 días siendo inexpugnable. Hace más de un año que ningún equipo ha logrado llevarse los tres puntos de la Villa del Río. Hay que remontarse al 27 de septiembre de 2009 para contemplar una derrota de Luis Rueda en casa. Fue frente al Atlético Balears, ahora en Segunda División B, y por la mínima (0-1). Otro dato arrollador a favor del preparador asturiano es que la pasada campaña sólo cedió cinco derrotas en 40 jornadas y que este curso es, junto al Binissalem, el único equipo invicto.
Afinar en las áreas
Pero no todo son elogios para el conjunto ibicenco. Su inicio de competición ha sembrado dudas en un entorno que exige más de la plantilla y el cuerpo técnico. Los siete empates cosechados en las 11 primeras jornadas desvela ciertas carencias en el equipo. Un vestuario con escasos efectivos que ha sufrido numerosas lesiones; la falta de acierto en los metros finales de los hombres de ataque; y varios despistes defensivos que han costado goles conforman el Talón de Aquiles de la peña esta temporada. El desafío que se ha propuesto la plantilla y la motivación principal de Luis Rueda es afinar en ambas áreas. El equipo entiende que ese plus de calidad y concentración les aupará donde les corresponde. Santa Eulària anhela encadenar un par de victorias consecutivas, algo que sólo ha logrado en una ocasión este curso, y encarar en igualdad de condiciones 30 días en los que se medirá a los tres primeros clasificados; Poblense, Constància y Binissalem.
Rueda: «Son datos exagerados, halagadores e importantes».
Luis Rueda cumplirá este domingo su encuentro oficial número 52 al frente de la Peña Deportiva. Como técnico sólo ha encajado cinco derrotas y considera que las estadísticas son «exageradas», aunque reconoce que «no cree» demasiado en ellas. No obstante, cree que son datos «halagadores e importantes» y, pese a que el inicio liguero «no está siendo brillante», se muestra «convencido de que lo será». Recuerda que ha habido personas que le han llamado «amarrategui» y piensa que la base de estos éxitos «está en los jugadores». En cuanto a su estilo como entrenador, considera que se «amolda» a las circunstáncias: «Mis equipos siempre han tenido buena actitud e itnentan jugar el balón aunque el rival no quiera. Pero no entreno aquí igual que en otros equipos. Depende de la plantilla, el número de jugadores, la calidad y el talento. El carácter o la idea de un entrenador es inamobible, pero es un fracaso ir a cualquier equipo con la misma libreta bajo el brazo».
Casañ y Bazán dejarán su puesto a Rubén y Pierre.
Raúl Casañ, con una contructara en el isquiotibial, y Miguel Àngel Bazán, con un esguince de tobillo, están prácticamente descartados para participar en el encuentro de este domingo. Sus sustitutos natural serán el francés Pierre Cotant y el canterano Rubén Martínez. El primero, sin embargo, sufrió a principios de semana algunas molestias relacionadas con su larga lesión de rodilla, aunque no tendrá problemas para disputar su segundo encuentro liguero. Rubén, mientras, tendrá una nueva ocasión para demostrarle al técnico su seguridad defensiva.