Mario Ormaechea, entrenador del San Rafael, se lamentó ayer, otra vez, de la mala fortuna que persigue a su plantilla en lo que a bajas se refiere. Y es que, a las ausencias ya sabidas, hay que destacar que Bonilla no llega a tiempo para la partida. El técnico barcelonés considera, por tanto, que «el partido está muy desigualado». «Haremos lo que podamos», añadió.
El preparador de los 'rafelers' recordó que «los jugadores que faltan lo han jugado todo», por lo que piensa que ganar en Santa Eulària es «una misión imposible». «Ése es el titular. Si sacamos algo, doy vacaciones al equipo toda la semana», bromeó. Y es que «la única esperanza era recuperar a Bonilla para hacer un partido medio decente tácticamente y, sin embargo, no va a poder ser así». «Las bajas nos condicionan mucho y la batalla será desigual. Esperemos que no se ensañen mucho», continuó.
El catalán señaló que «no es llorar» el hecho de quejarse de la situación actual del 'San Rafi', sino que «es la pura verdad».