La medalla de oro en los 60 metros vallas estaba cantada. Tras confirmarse la baja de Jackson Quiñónez por una lesión muscular, Felipe Vivancos se había quedado como único candidato al título. El atleta ibicenco no dejó escapar la ocasión y se hizo con comodidad con el primer puesto para conseguir, de esta forma, su sexto título de campeón de España en pista cubierta, que se suman a las otras seis coronas que tiene al aire libre.
El nacional, teniendo en cuenta que ya había conseguido la mínima para el Europeo de París y que en Valencia no estaba su gran rival, fue más que nada un entrenamiento para Vivancos de cara a la próxima cita continental del 4 al 6 de marzo. «Va a ser un campeonato mucho más tranquilo de lo previsto y, salvo catástrofe, el primer puesto del podio no se me debe escapar», señaló el atleta en la jornada previa. Dicho y hecho. El problema es que, sin Quiñónez, la competencia era mínima, algo que se traduce en peores marcas.
A pesar de todo, y aunque la prueba se disputaba por la mañana y ese horario no suele ser el más idoneo para él, Vivancos empezó muy fuerte. En semifinales rebajó su mejor marca de la temporada corriendo en 7''69 segundos. Ese crono está a sólo nueve centésimas de su mejor marca personal, aunque lejos del récord de España, que ostenta Jackson Quiñónez con 7''52 y que consiguió en este mismo escenario hace tres años.
El ibicenco cruzó la línea de meta con varios cuerpos de ventaja con respecto a sus perseguidores: Ernesto Prados, que fue segundo con 8''16; Ignacio de Esquiroz, tercero con 8''24; y Daniel Junco, cuarto y clasificado por tiempos con 8''27. En la otra semifinal, el vencedor fue Juan Ramón Barragán, con un tiempo de 8''05 segundos.

La final
A las 12,45 horas llegaba el momento de la verdad. La condición de favorito de Vivancos era absoluta. Sin embargo, tampoco podía fiarse. No sería ni el primer ni el último atleta que ve arruinada una competición importante por una salida nula o una caída desafortunada. Había que ir a asegurar el primer puesto y el tiempo, en este caso, era lo de menos. La salida de Vivancos fue correcta, pero se trabó en la primera valla y eso hizo que su marca no fuera excesivamente buena, dos centésimas más que en semifinales: 7''71. Barragán (8''02) y Orduña (8''10) completaron el podio.
Pero lo importante es que se había proclamado, una vez más, campeón de España. Y ya van doce veces en las que el vallista se ha subido a lo más alto del podio en un Campeonato de España absoluto.
«Es una cifra bastante importante de títulos y es para estar muy satisfecho», comentó Vivancos, quien, desde ahora mismo, piensa en la próxima competición importante, el Campeonato de Europa de pista cubierta de París. «Estoy en un buen momento y no se puede descartar nada en esta competición», ha afirmado el ibicenco. Por lo pronto, ya sabe lo que es sumar una medalla en un Europeo -fue subcampeón en Madrid 2005-. El proxímo 6 de marzo, en la capital de Francia, el hombre de oro busca medalla.

Vivancos: «Esta medalla no tiene menos valor por no estar Quiñónez»
Felipe Vivancos se mostró muy satisfecho con la medalla de oro obtenida ayer en Valencia y considera que la ausencia de Jackson Quiñónez no resta importancia al título en los 60 metros vallas. «Los campeonatos son para ganarlos, esté quien esté. El hecho de que no estuviese Jackson Quiñónez no hace que esta medalla tenga menos valor, porque lo que queda, al fin y al cabo, son los títulos. Dentro de unos años nadie se acordará de quién estaba en la final, sino de quién la ganó», dijo.
La prueba, eso sí, no tuvo complicaciones para el ibicenco. «Estaba claro que mi marca era mucho mejor que la del resto de los perseguidores y, además de Jackson, tampoco estuvo Javier López, que es otro de los que podían ponerme las cosas más difíciles. De todas formas, creo que he hecho un buen campeonato y estoy satisfecho, porque a pesar de correr por la mañana he sido capaz de hacerlo en 7''69, lo que me coloca el undécimo en el ránking europeo. La cosa, por el momento, está marchando bien», señaló.