El Ibiza Club de Rugby tendrá que esperar algún tiempo más para cantar el alirón en la Liga Balear sénior. El conjunto ibicenco cumplió con su objetivo y venció ayer por la tarde al Menorca Rugby por 8-24 en un partido que, en palabras de su presidente-jugador, Mauricio Páez, «fue durísimo». Sin embargo, la sorprendente victoria del Ponent B sobre el Bahía por 32-0 hace que el título aún no esté asegurado.
«El Ponent B está contando con jugadores de su primer equipo, que ya está descendido de División de Honor, por lo que ayer venció claramente al Bahía y aún puede cazarnos. Nosotros llevamos nueve victorias en nueve partidos, mientras que ellos suman siete triunfos en nueve encuentros. Todavía quedan tres jornadas y, en el último encuentro, nos enfrentamos a ellos», añadió.
En cuanto al partido ante los menorquines, el equipo que dirige Alexis Carbia sólo pudo contar con 14 jugadores. En el primer tiempo se puso 0-14 a favor, con un ensayo del francés Martin Gschaedler, que debutaba con el equipo. Ignacio Sparano y Juan Otero lograron los otros dos ensayos.