El Pacha Ibiza quiere dar el salto a Superliga 2 en los tres últimos partidos que le quedan por disputar. | Marco Torres

El Pacha Ibiza Voley perdió este sábado su carácter de invicto en casa, aunque el objetivo del ascenso a Superliga 2 sigue intacto. El conjunto ibicenco se mantiene líder, aunque esta semana descansa y deberá estar pendiente de los resultados. «La derrota del sábado no ha supuesto nada a nivel de clasificación, pero nosotros estamos cabreados. No jugamos bien y, aunque sabíamos que tarde o temprano esa primera derrota en es Viver podía llegar y pese a la ovación de nuestro afición tras el partido, seguimos con mal sabor de boca. Ojalá podamos resarcir a nuestro público en el penúltimo partido de liga frente al Andorra», señala Juan Antonio Ripoll, capitán del equipo.
El tramo final del campeonato en la Liga FEV promete ser apasionante, sobre todo porque el Pacha Ibiza tiene que medirse a equipos de la talla del Llars Mundet, Andorra y Textil Santanderina. «El calendario es muy complicado y son tres partidos muy difíciles, aunque lo bueno es que dependemos de nosotros mismos. Dentro de diez días jugamos contra el Mundet, que lleva ocho derrotas pero que, en su casa, pocos le han podido ganar. Después, recibimos al Andorra, que es el equipo que más veces nos ha ganado. Por último, cerramos la competición visitando al Textil Santanderina, que seguramente también se jugará mucho», indicó.
Ripoll cree que el partido clave «será ante el Andorra. Sería bonito lograr el ascenso en casa porque, además, no tendríamos que ir a Santander en la última jornada con todo por decidir».