Víctor Canseco continúa con su preparación, tanto física como psicológica, con el objetivo de volver a contar con fuerza para futuros torneos. El pasado fin de semana puso punto y final a su estancia en el 'stage' internacional de Castelldefels, incluido en el calendario de la International Judo Federation (IJF). Allí volvió a darlo todo con el fin de volver a ser aquel yudoca que, con la medalla de bronce del Europeo sub 23 de 2010, aseguraba un gran porvenir y una garantía de sucesión a Àngel Parra, hoy por hoy el número uno español en el peso de +100 kilogramos.
Sobre el 'stage', el ibicenco sólo tuvo buenas palabras: «Ha sido una experiencia muy positiva. Me vino bien después de toda la falta de entrenamiento que llevaba arrastrando durante toda la temporada por diversos problemas físicos y personales, y la falta de rodaje de competición. Este año no he sido convocado por la Real Federación Española de Judo para ninguna actividad de competición. Sólo he participado en dos jornadas de la Liga Nacional de Clubes, con el Judokan Valencia, y en el Campeonato de España absoluto. A pesar de todo, me he encontrado muy bien durante la concentración y he podido entrenar a un nivel muy alto».
Adiós al «calvario»
El josepí se siente especialmente «satisfecho» porque vuelve a sentirse yudoca. «He vivido todo un calvario en 2011. Desde mi reincorporación al Centro de Alto Rendimiento de Madrid, a finales de mayo, he asentado mucho más la cabeza y me he centrado única y exclusivamente en los entrenamientos. Ahora tengo un nivel de forma aceptable para aguantar los entrenamientos y eso hace que, poco a poco, vaya recuperando el estado de forma óptimo para poder estar lo antes posible a mi mejor nivel», explicó.
Otra lesión
Con todo, un nuevo contratiempo se cruzó en el camino de Víctor Canseco. «A mitad de concentración sufrí un esguince en el ligamento lateral externo de la pierna derecha que me impidió entrenar al nivel de los primeros días, pero seguí entrenando duro con un buen vendaje gracias al trabajo del equipo medico. Físicamente me voy encontrando mejor. Ahora estoy más cerca del peso con el que más rindo compitiendo. Con el entrenamiento diario crece mi estado de forma, también psicológicamente», dijo.