Urit Kelly, en acción. | Marco Torres

El Eivissa Básquet sa Graduada mantiene uno de esos dilemas que no permiten planificar en condiciones una temporada. El club arrancó los entrenamientos oficiales el pasado 1 de octubre con la notable ausencia de su principal referencia ofensiva desde hace años; el pívot bahamés Urit Kelly.
El jugador afincado en la Isla y el club de Vila tienen la firme intención de ligar durante un año más sus destinos para la próxima campaña en Liga EBA, que arrancará a mediados de noviembre. Sin embargo, la delicada situación económica obliga a la entidad que preside José Antonio Ribas, 'Cote', a negociar los contratos a la baja. De hecho, el equipo colegial sigue pendiente de las ayudas institucionales para saber qué futuro le espera en la competición nacional.
Kelly, que cumplirá el próximo mes de noviembre 37 años de edad, es una de las columnas vertebrales del Eivissa Básquet desde que aterrizara en el equipo ibicenco. En las dos campañas que jugó en Liga EBA (2008-09 y 2009-10) promedió 14 puntos, 7 rebotes y 17.7 puntos de valoración por encuentro, cifras que reflejaban la importancia de su presencia sobre la pista.
En los próximos días, el pívot de 1.97 metros de altura deberá resolver su futuro. Todo apunta a que aceptará la oferta del club colegial, pero una posible negativa supondría un auténtico problema para la plantilla de Dani Perdiguero, en la que no abundan precisamente los jugadores interiores.