La eclosión de Juana Molina

El desparpajo y el criterio con que juega cada fin de semana le delatan. Juana María Molina-Prados (Ciudad Real, 11-03-1991) es ya una de las piezas fundamentales en la dirección de juego del Space Tanit, a pesar de tener que competir en ese puesto con dos veteranas de la canasta como son Anna Boleda y 'Titxu' Ibarreche.
La joven base manchega ha ganado madurez en el inicio de su tercera temporada en Liga Femenina 2, categoría en la que debutó con el Alvargómez de Guadalajara en 2009.
Molina desprende pasión y garra en cada acción en la que interviene. Posee una habilidad innata para atosigar a su oponente, en el apartado defensivo, y para encontrar la mejor opción de tiro cuando su equipo tiene la posesión.
Este sábado frente al potente Canoe se convirtió en la máxima anotadora del cuadro verdinegro con 20 puntos, 18 de los cuales alcanzó desde fuera del perímetro. La base de Manzanares completó su gran actuación con cuatro asistencias y 13 puntos de valoración, guarismos que no evitaron la primera derrota de las ibicencas esta temporada (81-84).
Regularidad
Juana Molina ha encontrado con Lucas Fernández una regularidad en su juego -disputa una media de 27 minutos por los 22 del ejercicio anterior- que le permite mejorar sus registros personales y el de sus compañeras.
Pero la 'promesa' verdinegra no sólo ha ganado peso dentro del vestuario por la confianza que ha depositado en ella su técnico. Molina ha perfeccionado su lanzamiento exterior y eso hace mucho más peligroso al Tanit.
En sus tres últimas temporadas promediaba un 34 por ciento de acierto en tiros de tres puntos y actualmente supera el 45%. En cuatro jornadas, ha 'clavado' 11 triples y su valoración media por partido se ha doblado respecto al curso anterior (5,9 puntos de media en 2010-11 por los 11,5 del presente curso).
El Space Tanit dio con la tecla al confiar en una de esas jugadoras con talento y raza que no dan un paso atrás ni para tomar impulso.