Paolo, delantero del Atlético Isleño, intenta driblar al portero del Platges de Calvià Flexas en la primera acción de peligro en el minuto uno. | Marco Torres

ATLÉTICO ISLEÑO, 1
PLATGES DE CALVIÀ, 1

ATLÉTICO ISLEÑO: David Prats (1); Juan Martínez (1), Niki (1), Winy (1), David Yeste (2) (Pepe Ruiz (s.c.), min. 83); Tomás (2); López (1) (Xiqui (1), min. 59), Ausín (2), Víctor Galera (1) (Chico (1), min. 59), Toni Ramírez (1); y Paolo (2).
PLATGES DE CALVIÀ: Flexas (2); Juanjo (1), Germán (1), Josele (1), Escobar (1) (David (1), min. 76); Santiago (2); Arjona (1), Toñito (1), Daniel Pérez (1) (Sergi Garcés (2), min. 51), José Mari (2); y Marcos Priego (1) (Xisco (1), min. 68).
Goles: 0-1, min. 53, José Mari, tras un rápido contragolpe. 1-1, min. 57, Paolo, tras golpear el balón en el defensa del Calvià Germán.
Árbitro: Reus Vidal. Regular. Amonestó a los jugadores locales López, Ausín y Niki y a los visitantes Garcés, David y Arjona.
Incidencias: Municipal de Can Misses. Unos 200 espectadores.

El Atlético Isleño se olvidó ayer de marcar y se tuvo que conformar con un reparto de puntos ante el Platges de Calvià que, visto lo visto, sabe a muy poco. El conjunto de Jaime Mascaró y Pepe Arabí dispuso de hasta diez claras ocasiones de gol, pero sólo acertó en la jugada más inocente, con un gol en propia puerta del defensa mallorquín Germán. El equipo visitante, por su parte, sólo tuvo dos oportunidades, pero las supo rentabilizar: la primera, en el minuto 53, supuso el 0-1 y, la segunda, en el 94, estuvo a punto de darle los tres puntos ‘in extremis'. Unos tanto, y otros tan poco.
El partido comenzó con un Atlético Isleño ambicioso y decidido a resolver por la vía rápida. La primera ocasión llegó en el primer minuto de juego, con un mano a mano de Paolo y Flexas y un posterior disparo a quemarropa de Víctor Galera que el portero despejó con grandes apuros. El resto de la primera parte fue un auténtico acoso y derribo por parte del conjunto local, que pudo adelantarse en el marcador en el minuto 13, con un disparo alto de López; en el 31, con un cabezazo de Ausín; en el 33, con un intento de vaselina de Paolo o en el 45, con otro remate de cabeza de Ausín. Sin embargo, el gol no llegaba y en la grada, en el descanso, ya se empezaba a sospechar el viejo axioma de quien perdona...
No hizo falta mucho tiempo para comprobar la certeza de dicha suposición con el gol del Platges de Calvià en su primera aproximación al área defendida por David Prats. La jugada, además, vino precedida de una acción que pudo haber significado el 1-0, pero Toni Ramírez, completamente desmarcado, remató flojo y mal a las manos del portero. Flexas sacó rápido el balón y el equipo visitante armó un rápido contragolpe, que culminó con el gol de José Marí en el minuto 53. El Calvià ganaba sin merecerlo, mientras que el equipo local todavía se lamentaba de todas las oportunidades desaprovechadas.

Gol fantasma
El Atlético Isleño tuvo mejor suerte cuatro minutos después y eso que la acción parecía sin peligro. Paolo recibió el balón dentro del área escorado a la izquierda y su centro golpeó en el cuerpo de Germán para alojarse en el fondo de la red. En el acta arbitral finalmente se dio el gol a Paolo, aunque el autor verdadero fue el defensa. El Isleño, mientras tanto, siguió insistiendo y pudo alcanzar su premio pasado el minuto 90, en otro remate de Paolo que detuvo Flexas, si bien la duda es si lo hizo antes o después de que el balón traspasara la línea de gol. El Platges de Calvià aún tuvo la oportunidad de ganar en el minuto 94, pero David Prats, por dos veces, desbarató milagrosamente la última jugada.