El rey de los derbis no falló. El San Rafael volvió a salir victorioso de un partido de rivalidad regional tras superar ayer al Atlético Isleño por 3-1, un resultado engañoso a tenor de lo visto al o largo del partido, en el que Óscar Roig tuvo más protagonismo del necesario al poner el listón excesivamente alto. En la primera parte, en la que hubo pocos disparos a puerta, el equipo ‘rafeler' fue ligeramente superior, pero en la segunda mandó el conjunto de Pepe Arabí, que tuvo la mala fortuna de encajar dos goles en la recta final, uno de ellos de fantasía, después de haber perdonado ante la meta de Javi Seral, sensacional en las acciones cruciales de ayer.
El primer tiempo fue prácticamente de estudio por parte de uno y otro equipo. El San Rafael, con más calidad en sus filas, llevó la manija del partido ante un Isleño decidido a atrincherarse atrás y tratar de aprovechar alguna contra o, en su defecto, una jugada a balón parado.
Las llegadas al área fueron contadas. Por eso los visitantes decidieron probar fortuna desde larga distancia cuando tenían oportunidad. Paolo fue el primero en probar fortuna a los dos minutos y medio, pero su escoradísimo disparo fue directamente a las manos de Javi Seral.
A los cuatro minutos llegó el primer lanzamiento entre los tres palos del cuadro local, en una acción que ni siquiera puede considerarse oportunidad de gol. Fue en un lanzamiento de falta desde la banda derecha que acabó convirtiéndose en un centro chut de Grimaldo sin peligro alguno.
Guzmán, desequilibrante
Las defensas se imponían a los ataques, que no sabían cómo encontrar espacios. Los de Arabí continuaron probando suerte de lejos, con Paolo y Migui como lanzadores, pero con la misma suerte: ninguna. Los pupilos de Mario Ormaechea empezaron a encontrar un filón en la banda derecha, la de Iván Guzmán, que le hizo más de un traje a Ricky Montaño.
Su primera lección de clase a los 18 minutos, cuando penetró en el área y su centro lo desvió un defensa. José Luis esperaba solo atrás. A le media hora de juego volvió a repetir la jugada con idéntico final. El último pase era lo único que estaba fallando. Entre ambas acciones, los ‘blue' reclamaron la expulsión de Javi Escandell por una falta en la que el amonestado fue finalmente Javi Escandell.
El primero
Acto seguido se rompió el ‘cerocerismo'. Ivan Aledda, arrancando desde el costado izquierdo, combinó con José Luis, recibió el balón en el área, donde se coló entre dos defensores para cruzar el balón al primer parlo. Espectacular. Espoleado por el gol, el ‘San Rafi' se fue arriba a por el segundo y casi lo consiguió al minuto siguiente, cuando Adrián Ramos se internó en el área y se fue al suelo tras el contacto con Ricky Montaño, que se jugó el penalti y consiguió que el balón se marchara a córner.
De nuevo el San Rafael acarició el segundo, esta vez casi sin quererlo. Grimaldo abrió el balón a la derecha y Víctor, que recibió en el lateral del área, lanzó un cabezazo junto al palo en su intento por mandar el esférico al corazón del área. El que no falló fue Javi Escandell en el 38. El jugador del Isleño, en segunda jugada, se plantó solo ante Seral y marcó con a placer el 1-1 con el que se llegó al descanso.
A la salida de vestuarios, el ‘San Rafi' saltó al campo con Franco en sustitución de Iván Guzmán, lesionado, teniendo que actuar Piquero como centrocampista por la izquierda. El Isleño dio entrada a López, a la postre el mejor de los suyos, por Ricky Montaño, que no había cuajado un buen partido. A los seis minutos, Aledda también se tuvo que retirar tocado, por lo que entró Javi al terreno de juego, desplazando a José Luis a la banda derecha.
El cuadro de Ormaechea había perdido calidad individual y el Isleño le perdió el respeto por completo a su adversario. Poco a poco, los visitantes se fueron haciendo con el mando del partido y a llegar con peligro. Eso sí, el primer susto se lo dio el propio San Rafael a sí mismo, con un apurado pase de cabeza de Pau Pomar a Seral al que el portero llegó milésimas de segundo antes que el delantero. Respiraban los ‘blue'.
La jugada clave llegó en el minuto 72. Una contra mortal de los de Vila dejó a Migui, que conducía el balón, y Paolo solos contra el portero. El ex del Tomelloso pecó de avaricia y su disparo lo repelió el portero. Seguro que todavía tiene pesadillas con esta acción. Cinco minutos después, un gran pase picado de Toni Ramírez dejó a López con un buen ángulo para disparar. Y eso hizo el jugador que había entrado al descanso, pero la manopla izquierda de Seral envió la pelota a saque de esquina.
Dicen que el que perdona lo acaba pagando y eso mismo fue lo que le pasó al conjunto de Can Misses. El ‘San Rafi', que en todo el segundo tiempo contabilizaba dos intrascendentes disparos -uno lejano de Piquero que tocó en un defensa y otro falta directa de Pepe Grimaldo, ambos a las manos de Prats-, desniveló la balanza en el minuto 83. Rubén Martínez se disfrazó de Luis Figo en la banda derecha para, tras un recorte, sacar un centro que rozó Franco y acabó con el balón en pies de Piquero, que marcó libre de marca en el área pequeña. Menudo mazado para el Isleño.
De las tablas a la puntilla
Con todo, Toni Ramírez dispuso de otra ocasión para empatar. Recibió el balón en el área, escorado a la izquierda, pero se entretuvo demasiado y Seral, que salió de la portería en plan líbero, metió la puntera para mandar el balón a saque de banda. A partir de entonces, dos expulsiones, por doble amonestación, para los visitantes (Tomás y Javi Escandell) y una obra de arte de Pau Pomar. El central, pegado a la banda derecha, se sacó un disparo desde el centro del campo para batir a un David Prats más preocupado de cortar un posible pase que de defender su portería.

15 jugadores, dos por partida doble, fueron amonestados por el árbitro Óscar Roig
A cualquiera que se le diga que el derbi acabó con 17 tarjetas amarillas, dos de ellas mostradas a un mismo jugador por partida doble, pensará que más que un partido de fútbol fue una guerra, pero nada más lejos de la realidad. Óscar Roig puso el listón demasiado alto en un partido físico, pero en el que no se produjeron acciones feas. La mitad de las amonestaciones se las pudo haber ahorrado en la tarde de ayer. También fue amonestado verbalmente un miembro del cuerpo técnico visitante.

LA CIFRA: 6 sancionados.
El San Rafael pierde cuatro jugadores por sanción para el próximo partido, en el que se medirá al Platges de Calvià a domicilio. Pau Pomar, Pedro, Piquero y Javi, que estaban apercibidos, tendrán que cumplir ciclo de amonestaciones por parte del ‘San Rafi'. El Atético Isleño no podrá contar con sus dos expulsados: Tomás y Javi Escandell.