Un instante del partido disputado en la primera vuelta entre el Atlético Isleño y el Manacor, que acabó en 0-1.

El parón por Semana Santa ha sido recibido por la mayoría de equipos como un balón de oxígeno con el cual refrigerar cuerpo y mente de cara al ‘punch’ final de la competición, de la que restan siete etapas hasta la meta el próximo 19 de mayo.

De regreso a la Liga, el Atlético Isleño tiene ante sí una final por la supervivencia en la categoría con un complicado desplazamiento a Manacor, hogar del exconjunto de Segunda División B que entrena el veterano Jaume Mut (17,30 horas). Crecido después de encadenar tres victorias consecutivas, el colectivo rojiblanco será un hueso duro para la formación de David Torres, que desconoce el triunfo desde el pasado 23 de febrero. El hecho de haber adquirido un solo punto de los últimos 12 disputados puede despertar el nerviosismo en un grupo que ha sufrido mil y un avatares este curso. Dos puntos separan a los azulones del corte con el descenso, a pesar de marchar decimocuartos, por lo que resulta obligado cosechar algo positivo esta tarde en Na Capellera.

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