En la imagen, Óscar Pujol acelera en la salida de Caló des Moro, en Sant Antoni.

La etapa reina de la Vuelta a Ibiza en mountain bike, de 77 kilómetros entre Caló des Moro, en Sant Antoni, y el polideportivo municipal de Santa Eulària, con un desnivel acumulado de 2.500 metros, alteró la composición de la cabeza de la general por parejas a falta de una última jornada para concluir la ronda ibicenca.

El asfixiante calor, el abrupto trazado y los inoportunos pinchazos volvieron a ser protagonistas en una jornada que finalizó al esprint y tras la que pasan a enfundarse el maillot amarillo el vasco Ibon Zugasti y el catalán Josep Betalú (Progress Probike). La victoria por parejas fue, no obstante, para el cordobés Víctor M. Fernández y el madrileño Jesús Del Nero (Bicisport Arenas), con un tiempo de 3 horas, 22 minutos y 27 segundos; si bien el primero en cruzar la línea de meta fue el italiano Damiano Ferraro. Cuartos y a escasos segundos entraron el ibicenco Enrique Morcillo y su pareja, el andaluz José María Sánchez (Scott Team), mientras que en féminas el triunfo de etapa fue para las transalpinas Celina Carpinteiro e Isabel Morgado, con un registro de 4h26’58, tras imponerse al esprint a las vencedoras en la jornada inaugural, Sofía Pezzatti y Sandra Klomp.

Los principales especialistas del BTT nacional e internacional fueron los protagonistas de una exigente etapa por la zona norte de la Isla. Un recorrido salpicado por los altos de Es Camp Vell y Puig de Morna, a 10 kilómetros para la meta, donde se desataron las hostilidades entre los primeros clasificados. Zugasti y Betalú dieron caza a los italianos Ronchi y Ferraro, que marchaban con cierta ventaja antes de la última ascensión, pero un doble pinchazo en la bicicleta de Zugasti le obligó a pedalear los 6 últimos kilómetros sobre las llantas, lo que precipitó que fueran absorbidos a escasos 200 metros para el final por sus perseguidores.