Los jugadores del San Rafael celebraron sobre el césped la victoria que les dio la permanencia. Como suele ser habitual, el entrenador no se libró de ser manteado

SAN RAFAEL: 5

R. MOLINAR: 2

El San Rafael seguirá en Tercera División la próxima temporada. El equipo de Vicente Román cumplió con el objetivo marcado después de jugárselo todo a una carta en la tarde de ayer. El conjunto ‘rafeler’ necesitaba los tres puntos contra el Rotlet Molinar, su rival en la pelea por la permanencia, y los consiguió con más facilidad de la esperada, certificando la salvación en una temporada muy agitada.

No hizo falta tirar de heroica ni hablar de milagros. El San Rafi fue tan superior al cuadro mallorquín que ya ganaba por 3-1 al descanso. Y eso que alineó un equipo de circunstancias, con una defensa inédita. Carvajal, delantero, volvió a jugar de central; Guti, central, lo hizo de lateral izquierdo; y Fisher, interior, actuó de lateral derecho. Menudo panorama. Era lo que había debido a las lesiones de Yeste y Aparicio, a la ausencia de Vega y a las molestias de Werner.

Todos tenían claro que este encuentro era una final. Solamente valía ganar. Por eso ya daba igual quién jugara. Tocaba dar el máximo y dejarse la piel en el campo. Y eso fue lo que hicieron los locales, arropados en la grada por más de medio millar de espectadores, que no quisieron perderse "el partido más importante de la historia" del club, como lo había calificado el técnico ‘blue’ anteayer.

El partido se puso pronto de cara. Vicent aprovechó una cantada por bulerías del portero visitante, tras un remate de Ramos, para marcar a placer cuando el minutero aún no había llegado a los dos dígitos. Lejos de venirse abajo, el Rotlet Molinar se volcó en ataque y la zaga ‘rafelera’ tuvo que emplearse a fondo para evitar ‘in extremis’ dos ocasiones de peligro.

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