Alberto Parrilla y Susana Sevillano, campeones de la vigésima edición de la Travessia de ses Llagostes.

Un cuerpo. Ésa fue la diferencia entre Alberto Parrilla (CN Santa Eulària), campeón por segundo año consecutivo de la Travessia de ses Llagostes, y la leyenda de la prueba, Javier Cardona, vencedor en nada más y nada menos que 11 ocasiones. Este año, como en el anterior, Cardona se quedó a nada de revalidar su título y ha comprobado, definitivamente, que hay un joven de 20 años que está dispuesto a discutir, brazada a brazada, su hegemonía en esta travesía a nado de 750 metros. Parrilla, que fue ligeramente más lento que el año pasado, se impuso al esprint con un tiempo de 8’43’’.

El ganador de la vigésima edición, que ha participado cuatro veces en esta mítica carrera a nado, señaló que había liderado «toda la travesía», pero que en los últimos metros Cardona, plusmarquista de la prueba con 8’24’’, consiguió acercarse lo suficiente para inquietarle. «He podido apretar un poquito más y he conseguido la victoria», explicó con tranquilidad tras una carrera que calificó de «disputada» a pesar de ganarla con un margen más amplio que el año pasado. Sin embargo, Parrilla considera que le faltan «muchas travesías» para romper el dominio del plusmarquista: «Javier Cardona ha vencido en once y a mí me queda mucho para conseguir superarlo», admitió.

Féminas

En categoría femenina, Susana Sevillano (9’58’’) pudo, por fin, hacerse con la ansiada langosta. En su primera participación, la edición de 2013, tuvo que vérselas en el mar con la seis veces medallista en los recientes Europeos de natación, Mireia Belmonte, que estaba en la isla de vacaciones. En ésta ganó con bastante holgura. Mónica Orozco, segunda clasificada, cruzó la meta a 16 segundos de la barcelonesa. «Mireia Belmonte es de otro planeta», afirmó la nadadora, que indicó que este año «ya tocaba comer langosta». Para la nadadora del CN Portus, la Travesía de ses Llagostes es una «fiesta del agua» y mostró su satisfacción por la gran participación de la presente edición. 376 personas se lanzaron al mar, batiendo el récord del año pasado, cifrado en 347.