Una acción de ataque del HC Eivissa durante el partido de ayer contra el Mislata en el pabellón Es Pratet. | DANIEL ESPINOSA

El HC Eivissa sigue en la pelea por la zona de play off de ascenso después de deshacerse ayer del Mislata en un partido en el que brilló en la segunda parte. Tras el descanso, los pupilos de Eugenio Tilves se convirtieron en un muro impenetrable para acabar ganando por diez goles de diferencia (26-16) un encuentro que al término de la primera mitad sólo dominaba por un tanto.

Desde el inicio se pudo vivir un partido con un continuo intercambio de golpes entre ambos contendientes. Las rentas fueron mínimas tanto para los ibicencos como para los valencianos. A falta de cinco minutos para el descanso, Miguel López, máximo goleador del encuentro con diez tantos, subió el 11-8 al tanteador, lo que suponía la máxima ventaja hasta entonces. Sin embargo, el tiempo muerto solicitado por los visitantes surtió efecto. Los locales no volvieron a ver puerta y Marc Andreu y Vicente Ferrer lo aprovecharon para meter de nuevo a los suyos en el partido antes del bocinazo final (11-10).

En la segunda parte, el HC Eivissa incrementó su intensidad en defensa. Eso, unido al cansancio de los jugadores del Mislata, la lesión de Marc Andreu, su mejor hombre, y las paradas de Gamallo, supuso un giro de 180 grados. Los valencianos solamente fueron capaces de transformar dos dianas en más de un cuarto de hora y eso permitió a los de Eugenio Tilves dispararse hasta un claro 19-12 (min. 46). Al final, y pese a rotar más a sus jugadores en los últimos diez minutos, el HC Eivissa acabó ganando por su máxima renta, diez goles.