Un instante del partido entre el Formentera y el Villarreal B. | SD FORMENTERA

El Formentera sacó un meritorio empate ante el Villarreal B, uno de los mejores conjuntos de la categoría. Los rojinegros supieron maniatar a un bloque que destaca por su buen trato de balón hasta tal punto que no se notó la diferencia entre el equipo que marcha en segunda posición y el que está peleando por mantener la categoría.

Ocasiones hubo pocas, claras casi ninguna. El principal culpable de esto fue el entramado defensivo que situó Juan Arsenal sobre el terreno de San Francesc con una línea de cinco atrás. Por delante de los defensas, tres centrocampistas y dos delanteros que, con una presión alta, agobiaron la salida de balón de los castellonenses.

El viento fue uno de los protagonistas de un partido en el que el Formentera salió muy enchufado. En apenas dos minutos ya se habían acercado al área visitante en un par de ocasiones, consiguiendo un lanzamiento de esquina.

Ese arranque poco a poco se fue enfriando y el submarino amarillo se fue haciendo con el control del esférico. Los jóvenes jugadores, algunos con experiencia en Primera División, demostraron un trato de balón exquisito, pero les faltó la profundidad necesaria para encontrar el gol.

El balón dormía en las botas del filial, que buscaba los huecos ante una defensa muy bien plantada. El Formentera, cuando robaba, buscaba un juego rápido y directo, pero sin efectividad. Los minutos iban cayendo y se llegó al 20 sin que los porteros tuviesen que intervenir.

En el 25, el Formentera trenzó una gran jugada que llevó el balón de la banda izquierda a la derecha para que Crespo pusiese un esférico que no encontró rematador. Fue la mejor de los locales en los primeros 45 minutos.

Esa acción estuvo precedida de los mejores minutos de los rojinegros, que empezaron a tener posesiones más largas. En un error, llegó la más clara del partido para el Villarreal. Mario se coló en el área en una buena maniobra y obligó a Marcos a salvar el primero del partido. Justo antes del descanso, fue Darío quien avisó con una volea que se fue excesivamente cruzada.

Tras el paso por vestuarios, el guion siguió siendo el mismo, con el control del balón por parte del equipo amarillo, que no conseguía crear peligro. Los de Juan Arsenal seguían bien plantados, intentando aprovechar algún balón parado o un despiste defensivo.

Mediada la segunda parte, llegaron las dos mejores de los locales. Nando probó fortuna con un disparo desde la frontal que blocó bien Cantero. Un minuto después, Juan Antonio se coló en el área con habilidad aunque sin apenas ángulo. El portero tapó bien y el disparo del punta se marchó al lateral de la red. En los instantes finales apenas hubo peligro en las áreas. Los dos equipos se empezaron a contentar con el resultado y así fue acabando el partido.

El punto tiene una importancia vital en una jornada que no fue buena para los rojinegros. El resto de resultados no acompañaron y los pitiusos se mantienen en la plaza de promoción, pero ven cómo el Peralada y el Olot se alejan tras conseguir sendos triunfos.

El Formentera tiene ahora por delante unos partidos de dificultad extrema en los que tendrá que sumar como pueda si quiere seguir en la pelea por la salvación. Las sensaciones del equipo no son malas pues está demostrando que puede competir contra cualquiera. En el debe sigue la falta de gol, que es una losa terrible a la hora de puntuar. Por lo pronto, los dos siguientes encuentros serán lejos de la isla. Primero, visitará Alicante para medirse al Hércules y, después, viajará a Mallorca.