Adel Mechaal y Rodrigue Kwizera aprietan en el esprint que decidió la X Cursa Eivissa Patrimoni. | Marcelo Sastre

En el último metro, en el último suspiro, en un ajustado esprint con polémica. Así se llevó el triunfo Rodrigue Kwizera en la X Cursa Eivissa Patrimoni. El atleta burundés –decimosexto del mundo en Doha 2019– apretó los dientes en la recta del puerto de Ibiza. Por el rabillo del ojo vio que Adel Mechaal le empezaba a superar y se lanzó hacia la derecha para frenar el avance del español. La maniobra fue muy comentada por el público asistente, pero finalmente los jueces la dieron por buena. La polémica no empañó la marca registrada. El africano dejó un tiempo de 29’32’’ que supone un nuevo récord de la popular carrera.
Desde los primeros compases se vio que la victoria iba a ser cosa de dos. Eran los principales favoritos y no fallaron. Tras una salida con un ritmo lento, antes del primer paso por meta ya habían destrozado la carrera. Ambos pusieron un ritmo infernal para quedarse solos y dejar descolgados a atletas como Dani Mateo o Yago Rojo, otros de los grandes favoritos. Nadie pudo acercarse a ellos y los dos se lo jugaron todo en el mencionado esprint.

Tras ellos, con un tiempo de 30’14’’, el podio lo completó Ignacio Giménez. El corredor local Anass Bourass fue octavo con un registro de 31’51’’.

Tras cruzar la línea de meta, Kwizera mostró su felicidad por la victoria. Con unas pocas palabras en francés, el de Burundi no quiso entrar en polémicas y se limitó a decir que era su primera vez en Ibiza y que estaba contento por acabar primero.

Por su parte, Mechaal estaba satisfecho con la carrera, aunque lamentó no poder ganar: «A la última curva llegué pegado a él para apretar en la recta. Era una llegada muy estrecha y, cuando he intentado adelantar, él ha tirado el cuerpo para la derecha y no he podido progresar porque tenía miedo a tropezarme con la valla y torcerme un tobillo. Son cosas de la carrera y él ha optado por esa táctica, que no es la más deportiva, pero sinceramente estoy contento con la carrera».

El atleta español llegó a Ibiza en mitad de su preparación para el Campeonato del Mundo de pista cubierta, que se celebrará en el mes de marzo en China. Mechaal alabó el recorrido y valoró lo diferente que es correr por las calles de Dalt Vila. Sobre si hay zonas de mucha difultad, dijo: «No es un circuito peligroso, pero sí que hay que estar atento. Para mí, hay un tramo que es peor, pero, como no es al inicio, la carrera llega rota y se puede ver bien el suelo».

Por último, destacó el calor del público y aseguró que le gustaría volver en un futuro. «Creo que esta carrera poco a poco va ir creciendo. En el futuro vendrán grandes nombres y los atletas internacionales servirán de inspiración para los jóvenes deportistas de Ibiza y de las Balears», conluyó.

Paseo militar

Mucho más fácil lo tuvo Marta Pérez en la categoría femenina. La atleta soriana era la que mejor palmarés tenía de todas las presentes y estaba llamada a llevarse la victoria. Así fue. Pérez marcó su ritmo desde el principio y, sin grandes rivales que le hicieran sombra, pudo hacer la carrera que ella quería.

En la primera vuelta se lo tomó con calma. La soriana controló la prueba con la joven Lucía Rodríguez siempre unos metros por detrás. Rodríguez nunca se fue de la carrera, pero tampoco tuvo opciones reales de llevarse la victoria.

Pérez apretó en los últimos tres kilómetros para evitar cualquier tipo de sorpresas y cruzó la meta con un registro de 36’26’’. Tras ella llegó su sombra, Lucía Rodríguez, con una marca de 36’38’’. El podio lo completó la atleta local Indre Barkute con un registro de 39’19’’.
La vencedora se mostró feliz por el resultado y aseguró que le había gustado mucho la carrera: «Hemos salido de día y, cuando volvíamos, estaba atardeciendo sobre la ciudad. Me ha gustado mucho. Y en cuanto a la carrera, la primera vuelta la he tomado con calma porque a mí el 10.000 se me hace muy largo. La segunda sí que me he exprimido más».
Sobre el cara a cara con Lucía Rodríguez, señaló: «Durante el primer tamo sí hemos ido juntas, pero siempre fui tirando yo. La tenía a 15 o 10 metros. Todo el rato le sacaba metrillos, pero no la he podido despegar del todo hasta el tramo final. Yo bajaba más rápido que ella por la zona de la ciudad».

Pérez también destacó el hecho de correr por Dalt Vila: «Me ha gustado mucho. Me pareció un tramo muy divertido. Si buscas una carrera rápida para hacer marca, no es ideal; si no, mejor que las carreras sean un poco diferentes. Esta es muy divertida y había gente avisando en las zonas peligrosas. Cuando iba por la zona del asfalto estaba deseando volver a las piedras».