Alejandro Machuca no ha disputado ni un solo minuto esta temporada con la UD Ibiza y es raro encontrarle en alguna convocatoria. Pablo Alfaro, entrenador del equipo, explicó ayer que «es un futbolista con una situación un poco especial, no el sentido de que él sea especial, que no lo es, pero sí que hay una serie de hábitos, de profesionalidad y de vida que hay que adquirir para poder competir al nivel que estamos».

El técnico celeste quiso dejar claro que «no es ningún rapapolvo, porque es muy buen tipo, pero no está acostumbrado al nivel de profesionalidad que se le exige al resto». «Hasta que no iguales ese nivel, es muy difícil entrar. Unos van en AVE y otros van en un tren con una velocidad diferente. Es como cuando subes a un juvenil y tiene que hacerse a los hábitos de los demás», expuso.

Alfaro no quiso obviar que el atacante «se lesionó en el partido de pretemporada contra el Castellón y empezó a entrenar dos meses más tarde». «Eso le ha llevado a estar en desventaja. Ahora es cuando está más cerca de ellos, pero la velocidad de crucero que tiene el grupo es la que hay y los compañeros no bajan el pistón. El mercado de invierno finaliza el 31 de enero. Estamos a mes y medio de poder acercarlo a los demás», señaló el míster.