Dani Creu, en Santa Gertrudis, durante la prueba del Campeonato de Baleares.

El piloto de Santa Eulària Dani Curreu (05/01/1983) está de vuelta. Mucho antes de lo esperado, el del Motoclub Dirt Riders Ibiza MC se volvió a subir a la moto, lo hizo con el objetivo de seguir al frente de la clasificación del Campeonato Balear de Motocross MX1.

Curreu sufrió un grave accidente el 29 de mayo durante unos entrenamientos en Santa Eulària. El piloto de 38 años fue ingresado en la UCI de la Policlínica Nuestra Señora del Rosario con varias fracturas y politraumatismos.

En concreto el diagnóstico fue: fractura de vértebra C2, aplastamiento con desplazamiento de disco de las vértebras C5 y C6, fractura de vértebra L4 y fractura del húmero del hombro derecho.

El cuadro era grave y se inició un proceso de recuperación lento y lleno de incógnitas. El propio Curreu reconoce que tanto él como su familia vivieron unos meses de angustia por no saber qué depararía el futuro ante las posibles secuelas de una columna vertebral muy dañada. Los neurocirujanos le hablaron de ocho o nueve meses de recuperación.

Al ser preguntado por el accidente, el ibicenco asegura que no recuerda nada: «Sé que quedaban pocas vueltas para terminar la tercera manga de los entrenamientos oficiales, pero no sé ni cómo caí. Tras el accidente, perdí el conocimiento hasta llegar al hospital. Estaba conduciendo y me desperté en la UCI».

Allí estuvo dos días, y otros 12 en planta, hasta que el 11 de junio recibió el alta hospitalaria. Se fue a casa de sus padres, donde habilitaron una habitación para sus cuidados. Estuvo otros dos meses en la cama para que las vértebras soldasen, levantándose para ir al baño y poco más.

Los meses iban pasando y la recuperación seguía su curso, yendo a las revisiones pertinentes. No fue hasta finales de septiembre cuando por fin pudo salir de casa a dar un paseo. Eso sí se encontraba muy débil.

En uno de los últimos chequeos, las dudas sobre el estado de la vértebra C2 le hicieron pedir una nueva opinión médica y el 13 de octubre viajó a Madrid para visitar al doctor Ángel Villamor, una eminencia en el mundo de la traumatología que, además de tratar a muchos pilotos, operó al rey Juan Carlos I.

Villamor ya había operado a Curreu en 2010 en una intervención de brazos, por lo que la confianza del piloto en él es total. Escucharle decir que podría volver a competir fue todo lo que necesitaba.

Lograr el título balear
Empezó entonces la última fase de la recuperación y su firme intención de volver a subirse a la moto para mantener su ventaja al frente del Campeonato de Baleares. Quedaban dos pruebas por disputarse y el ibicenco tenía muy claro que tenía que estar en Santa Gertrudis para amarrar el título autonómico.

Con apenas dos sesiones de entrenamiento, el pasado fin de semana se subió a la moto y volvió a la competición en Santa Gertrudis.

«Estaba muy débil y me costó mucho, pero quería hacerlo. Sabía que acabando la carrera conseguiría un buen puñado de puntos que me ayudarían a ganar el título. Además, me sirvió para ir recuperando sensaciones y volver a sentirme piloto», confiesa.

El 12 de diciembre, en Felanitx, se celebra la última prueba del Campeonato de Baleares en la que volverá a estar para proclamarse campeón de las Islas y poner un final feliz a un año duro.

Al ser preguntado sobre si no se plantea la retirada, es claro: «No, de momento no. Muchos amigos y pilotos me dicen que me retire, que ya tengo 38 años. Pero yo seguiré con la moto mientras me siga divirtiendo. Ya podría competir con los veteranos, pero antes del accidente estaba ganando a los chavales en la categoría reina».

Así pues, si el físico le respeta, el objetivo de Curreu es claro: terminar este año como campeón de Baleares y volver a ponerse en forma para poder defender el título autonómico el curso que viene. Dani Curreu vuelve a disfrutar.