Paco Jémez, durante un entrenamiento.

Si algo destiló el jueves Paco Jémez en la previa al encuentro de este viernes (21.00 horas) ante el Almería es confianza en sus jugadores. «Ellos son muy buenos y nosotros también», aseguró y esa premisa comparativa giró gran parte de la comparecencia en la que se mostró seguro de poder conseguir los tres puntos en los Juegos Mediterráneos.

Tras jugar el lunes y hacerlo hoy mismo, el técnico reconoció que fue una semana atípica: «Una semana muy corta, de las más cortas que puede haber en esta competición. Hemos intentado aprovechar el mayor tiempo posible, sobre todo para recuperar porque al ser una semana con los partidos tan juntos, la gente que juega... no tienes mucho tiempo para trabajar con ellos. Hemos aprovechado para hacer más táctica, que todavía tenemos mucho margen de mejora ahí. Hoy -ayer para el lector- se ha trabajado bien y veo al equipo recuperado y vamos a estar en perfecto estado».

Un rival muy potente

Sobre el mal momento del Almería, un equipo que parecía invencible hace un par de meses y ahora encadena cinco partidos sin ganar, dijo: «Esto es el fútbol. Llegó a llevarle una barbaridad de puntos al tercero y ha perdido toda esa ventaja y ahora no está en los puestos de ascenso directo. Es un equipo hecho para ascender y todo el mundo daba ya por ascendido. Yo todavía no lo descarto porque es muy buen equipo».

«Ha perdido toda esa ventaja y ahora se encuentra en una situación incómoda. Una situación en la que no se ha encontrado en todo el año y nosotros tenemos que intentar aprovecharnos de eso, pero siguen siendo muy buen equipo. A los leones les gusta dormir mucho, se pasan tres cuartas partes del día durmiendo, pero, cuando se despierta, sigue siendo un león. Esto es igual. Es un pedazo de equipo extraordinario y cuando se despierte se va a comer a quien se ponga por delante. Nosotros vamos a intentar que no se despierte esta semana», añadió.

En esa misma línea, pidió a su equipo que dé un paso al frente como hizo en La Rosaleda ante el Málaga: «La personalidad es siempre importante. Contra equipos como el Almería, que es de lo mejor de la categoría, esa personalidad tiene que aflorar. El partido va a estar en la pelea por quién tiene el balón. Somos equipos de querer el balón y tenemos que empezar a ganar el partido ganando esa pelea. Es difícil, pero tienes que tener mentalidad para apretarle y recuperar el balón y también personalidad para mantenerlo. Si somos capaces de hacer eso vamos a tener nuestras opciones».

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Por otro lado, a la pregunta de si Álvaro Jiménez será titular, Jémez no despejó la incógnita: «Álvaro no está todavía para jugar 90 minutos al ritmo que yo quiero. Podemos ponerlo de inicio e intentar sacarle el máximo rendimiento los minutos que aguante o aprovecharlo de salida de banquillo y que nos dé esa frescura y ese punch que él tiene.

Además, también confesó que tenía dudas sobre quién poner en el centro de la defensa junto a Goldar para sustituir al sancionado Juan Ibiza y sobre la pregunta por la vuelta de Sadiq al once almeriense, sacó pecho por Castel, señalando que lleva más goles. «Sadiq es muy bueno, pero el nuestro también es muy bueno. Muy bueno. No hay problema», sentenció.

Positivo

Por su parte, el entrenador del Almería afirmó: «Estamos en ese punto en el que nos ha pillado todo de manera inesperada. Con lo bien que nos iba. Estamos en ese punto en el que lo que prima es sacar la victoria. La clave es la contundencia en las áreas. Nos está costando marcar gol y con muy poco nos hace daño. Necesitamos ganar ya». Así comenzó su rueda de prensa Joan Francesc Ferrer, más conocido como Rubi.

El técnico del Almería se mostró positivo por recuperar futbolistas importantes que se perdieron los últimos partidos: «Estamos tranquilos, que no deja de ser exigencia, por recuperar el nivel y estamos seguros de que el equipo volverá a rendir mejor de lo que lo está haciendo últimamente».

Sobre la UD Ibiza destacó el potencial goleador de las últimas jornadas y dijo: «Es un equipo que juega para ir hacia delante. Estamos ante un partido de los que pueden hacer afición».

Por último, Rubi también lamentó la ansiedad que le entra a su equipo cuando se ve por detrás en el marcador. «Nos entran muchas prisas y con 60 minutos con un gol abajo todavía hay mucha leña por cortar. Veo al equipo muy precipitado cuando pasa eso. Estoy más preocupado por ser nosotros los primeros en marcar, pero también en estar más tranquilos cuando nos marquen primero».