Pedro Mayol alargó ayer su idilio con la Pujada a Aigües Blanques. Era el gran favorito y el piloto mallorquín no falló en esta ascensión que conoce a la perfección y en la que ha salido vencedor en las cuatro ediciones en las que ha participado. Solo el año pasado no tomó parte en la carrera. Además, en su última visita a la isla se impuso en la Pujada sa Cala, subida que también ha ganado en varias ocasiones.


Desde primera hora de la mañana, los aficionados ibicencos al motor fueron dando color a los 3.250 metros de la PM- 811 en los que se celebra esta prueba. La climatología respetó y el tramo que discurre entre Sant Vicent de Sa Cala y el cruce hacia Aigües Blanques se preparó para que los pilotos tomaran el protagonismo.


Dos subidas de entrenamiento y tres mangas de carrera. Ese era el menú que se dibujó para una mañana de velocidad y olor a goma y gasolina. Desde el primer momento, la subida se fue cobrando sus primeras víctimas. Aparecieron las averías y también algunas salidas de pista que dejaron fuera a varios de los favoritos como Salvador Seguí o Pedro Crespí, que estaban llamados a pelear por el podio.


Entre los que seguían en liza estaba el gran favorito a llevarse la general de montaña, un Pedro Mayol que no dio opciones. Se impuso con su Norma M 20 F en las tres mangas con una importante superioridad. Sus dos mejores ascensiones sumaron un tiempo de 3:58.244 con el que se impuso a la segunda clasificada, su mujer Caterina Bermúdez (Silver Car S3), que firmó un registro de 4:19.469. La tercera posición fue para el campeón balear del año pasado, un Miguel Ángel Campins que corrió con un carcross. Con un tiempo de total de 4:23.660 fue el mejor de este tipo de monoplazas. Además, el primer carrozado fue el ibicenco Bartolo Ramón con su Renault Clio.


Otras categorías
En cuanto al resto de categorías, en la modalidad de tramo cronometrado tampoco hubo sorpresas y el líder balear, Nadal Galiana, con su copiloto Lorenzo Ferragut, marcó un tiempo de 4:30.358 pilotando un Ford Escort WR. La segunda plaza fue para los ibicencos Jordi Romero y Jorge López con un Seat León y un registro de 4:37.914. El podio lo completaron José Campaner y Josep Egea (Skoda Fabia) con un tiempo acumulado de 4:46.690.


Por último, en regularidad solo había un participante que no pudo completar la prueba; en regularidad sport se impuso Joan Verger (BMW 2002 TII); y en regularidad supersport, lo hizo Pedro Valls (Volkswagen SIR), también único participante.