El partido del miércoles entre el Numancia y el Lleida dará mucho de qué hablar. Un partido suspendido que jamás se debería haber jugado y que lo hizo en una fecha nefasta, con los sorianos siendo campeones y sin jugarse nada. Ganó el Lleida en perjuicio de varios equipos, entre ellos el Formentera y el CD Ibiza, siendo este último el más perjudicado que dejó de depender de sí mismo.
Uno de los más críticos fue el capitán de los de Vila. Marcos Contreras fue contundente en sus redes sociales y aseguró que la liga estaba adulterada al permitir que se jugase este partido en estas fechas.
No fue el único que mostró su disconformidad en el club. En unas palabras recogidas por IB3, el técnico, Raúl Garrido, lamentó que el partido no se hubiese disputado antes para evitar que se diese esta circunstancia de que el Numancia llegase ya siendo campeón y sin jugarse antes. «Nos perjudica a muchos equipos y se veía venir desde enero. No había razón entendible para que el partido no se jugase mucho antes y bajo ningún contacto entre dos jornadas con horario unificado».
En la misma línea se pronunció el técnico del Formentera, Míchel Alonso: «Es un sinsentido poner un partido entre las dos últimas jornadas que se ponen en horario unificado por cuestiones de salud de la competición. Tuvieron 15 semanas para jugar ese partido y lo juegan ahora. Es un sinsentido».
Tanto CD Ibiza como Formentera llegan a la última jornada con opciones de clasificarse para el playoff. Los primeros deben ganar y esperar un pinchazo del Lleida en casa ante el Numancia, mientras que los rojinegros necesitan el pinchazo del Lleida y del CD Ibiza.
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