Imágenes de Facu Campazzo este miércoles en el Campus Paco Redondo. | Tomás Sánchez Venzalá

Facundo Campazzo fue ayer el gran protagonista del Campus Paco Redondo, que se viene celebrando en el pabellón del Col·legi Sa Real. El internacional argentino, que esta ultima campaña jugó en los Denver Nuggets y jugó varios años en el Real Madrid, charló con los pequeños, firmó autógrafos y se hizo fotos con todos ellos, que luego le pusieron en algún pequeño apuro, entre comillas, durante el turno de preguntas.

Facu destacó las habilidades de Stephen Curry en una de las cuestiones que le realizaron y no ocultó lo que se sufre al tenerle en contra. «Antes de empezar ya sabes que te va a meter 30 puntos. Empiezas 30 puntos abajo y eso me da bronca», apuntó entre risas.

Campazzo atiende a los niños del campus, ayer en el pabellón del Col·legi Sa Real. Fotos: MARCELO SASTRE

También destacó que lo que le hizo «cambiar el chip» y comenzar a destacar en el mundo de la canasta fue el «entrenamiento extra». «Me hizo mejorar como jugador, conocer buenos hábitos, cambiar el chip y volver al Madrid» tras el paso por el UCAM Murcia, agregó.

Campazzo no ocultó que cumplió un sueño cuando se puso «la camiseta de los Denver» en la NBA. Además, también apuntó a los jóvenes baloncestistas que durante esta recién finalizada campaña realizó otro cambio de chip para centrarse en lo que tenía que hacer para continuar en la liga más importante del mundo.

Al término de la jornada, el base atendió en exclusiva a Periódico de Ibiza y Formentera. El argentino bromeó al afirmar que los niños «tienen mucho más peligro que los periodistas» a la hora de realizar preguntas. «Además, son cien por cien sinceros. Se portaron de primera. Hicieron preguntas interesantes fuera de lo común. Disfruté mucho, aprendí mucho de ellos también y me lo pasé muy bien», continuó.

Campazzo se puso en la piel de los jóvenes y reconoció que le habría «encantado ir a un campus» de joven. «Nunca tuve la oportunidad. Si hubiera estado en la posición que están ellos, me habría gustado ver a un jugador cercano, que responda las preguntas y fuera superamable. Es lo que me habría gustado y por eso intenté ser lo más amable y cercano posible. Lo paso bien, lo pasan bien y es muy recíproco todo», explicó.

Es más, de hecho le gustaría encontrarse en un futuro con alguien que haya estado en un campus en el que él haya participado. «Me encantaría eso y que me sacase el puesto», dijo entre risas. «Ahora es cuando se están divirtiendo. Es la parte más pura del niño que practica baloncesto. Quizás alguno lo practique más y otro se dedique a otra cosa. Aquí se ve lo más sincero y se disfruta de eso», sentenció.