Momento en que llega el campeón a meta. | Sergio García

Cuando hay una maratón todos miran hacia el atleta africano. William Cheboi era el gran favorito y no falló. El keniata se hizo con un triunfo incontestable, pero se quedó lejos de poder atacar el récord de la prueba y eso que por momento soñó con ello, pero el viento apareció en el tramo final para frenar al vencedor. Tampoco hubo sorpresas en la categoría femenina, donde su compatriota Monica Cheruto también ganó con comodidad, pero también se quedó lejos de la mejor marca registrada.

Más de 400 valientes se reunieron a los pies de Dalt Vila para afrontar los 42 kilómetros y 195 metros que les iban a llevar hasta Santa Eulària, previo paso por Santa Gertrudis en un recorrido bonito, pero muy exigente con muchos toboganes para poner a prueba las piernas.

Ritmo de récord

Cheboi salió disparado desde el primer momento y los primeros 10 kilómetros los devoró a un ritmo de 3’09’’. La subida a Santa Gertrudis le hizo bajar a 3’13’’ y mantuvo ese ritmo hasta el kilómetro 30. El keniata parecía en disposición de establecer un nuevo récord de la prueba, pero entonces fue cuando apareció el viento. Se dio de bruces contra él, gastando muchas energías y perdiendo cualquier opción de batir la marca de Eliud Kibet Too (2h14’30’’).

Cheboi llegó a meta visiblemente cansado para parar el reloj en 2h21’16’’ (3’20’’/km) y proclamarse campeón de la sexta edición de la Santa Eulària Ibiza Marathon. La segunda posición fue para su compatriota Kiprop Lagat (2h28’00’’). El influencer italiano Massimiliano Andrea Milani (2h38’41’’) completó el podio.

En la categoría femenina, Monica Cheruto también hizo valer su favoritismo y le ocurrió algo similar a lo de Cheboi. Tras salir a un ritmo de 3’42’’ acabaría la carrera con una frecuencia de 3’59’’ que le hizo registrar un tiempo de 2h48’01’’, muy lejos de las 2h33’33’’ de Adenke Ashefani que voló el año pasado.

En el podio, Cheruto estuvo acompañada por la británica Mary Marshall (3h28’45’’) y la alemana Anne Duijsens (3h31’12’’) que llegaron muchos minutos después y en mitad del aluvión de corredores del resto de categorías.

22K | Récords a pares

Si había una carrera en la que se prevía igualdad dentro de la trilogía de la Santa Eulària Ibiza Marathon esa era el 22K masculino. La presencia del olímpico Dani Mateo y el plusmarquista chileno de casi todas las distancias, Carlos Martín Díaz, prometía un bonito mano a mano y no defraudó.

Desde el primer momento se vio que estos dos corredores estaban en otra liga y se fueron por delante. Una lucha de igual a igual en la que el atleta sudamericano intentó sorprender con un ataque al paso por el kilómetro 10, aprovechando la bajada. Cogió unos pocos metros de ventaja, pero al cabo de dos kilómetros Dani Mateo ya había cerrado el hueco.

Siguieron juntos hasta un nuevo ataque de Díaz cuando quedaban tres kilómetros. Ahí el español demostró que era el más fuerte y no sólo lo atrapó. También consiguió unos pocos metros de ventaja que conseguiría defender hasta cruzar la meta con un tiempo de 1h09’41’’, que suponía un nuevo récord de la prueba, mejorando su marca del año pasado. Cuatro segundos más tarde llegaba el chileno, que también había corrido por debajo del récord. El podio lo completó Federico Casati.

Una vez recuperado el aliento, Mateo confesó: «Estoy satisfecho, pero ha sido duro. En la previa decía de bajar de 1h10’ y ha sido duro. El circuito piensas que es favorable, pero los subes y baja acaban fatigando y, al final, veía a Carlos tan cerca y en ese mano a mano piensas cuidado que se te escapa».

También estaba feliz el chileno que visitaba Ibiza por primera vez y no dudó en afirmar que quiere volver en futuras ediciones: «Me encantó la carrera, no se me hizo monótono como otras pruebas en las que uno va a buscar la marca. Aquí cada cinco kilómetros iba cambiando el paisaje y fue muy entretenido. Las sensaciones fueron excelentes y me gustaría volver el próximo año a correr más rápido».

Féminas

En la categoría femenina, la ganadora fue Clara López, que con un tiempo de 1h23’19’’ también estableció un nuevo récord en la distancia. La atleta que no tuvo rival en esta distancia se mostró muy contenta por la victoria: «Esperaba hacer buena marca, pero no tanta. Me he sorprendido a mí misma». «Me encanta el recorrido, es muy chulo pasas por el pueblo y acabas en el mar. El año pasado la hice lesionada y me quedaba esa espinita y por ese he vuelto», añadió.

En el podio la acompañaron Alessia Mira (1h33’46’’) que fue segunda por delante de Olga Caparrós (1h39’30’’).

12K | El triunfo se queda en casa

Adrián Guirado era la baza ibicenca para esta sexta edición de la Santa Eulària Ibiza Marathon y no falló. El corredor de la Peña Deportiva se llevó el triunfo de manera incontestable, pero no pudo atacar su propio récord de la prueba. En la categoría femenina Fedra Luna impuso su condición de favorita.

La 12K arrancó con una participación envidiable. Una larga serpiente multicolor llenó el paseo marítimo de Santa Eulària, pero en los puestos delanteros algunos ya salían con la intención de volar.

Guirado y Zsolt Koszar se marcharon por delante en un mano a mano que no tardaría demasiado en convertirse en una carrera del ibicenco contra el cronómetro. Al final no pudo atacar su propio récord, pero sí se pudo dar un baño de masas en el último kilómetro entrando en meta entre los aplausos de sus familiares y amigos. Al final, un registro de 40’09’’. Koszar que entró con unos pequeños problemas musculares paró el reloj en 41’55’’.

Velocidad

Tras ellos llegó Fedra Luna que fue la tercera de la general y la primera mujer en cruzar la meta con una marca de 42’36’’. La atleta argentina, afincada en España, que tiene el récord sudamericano de los 3.000 metros, no dio opciones a sus rivales y ganó con un amplio margen sobre Elisa Melilli (45’14’’) y Sharon García (49’05’’) que completaron el podio.

Una vez cruzada la meta, Fedra Luna reconoció que había subestimado el recorrido «un poquito». «Es una carrera en la que hay que salir con cuidado porque tiene unas subidas importantes. Más allá de esto, el apoyo de la gente como si te conociesen de toda la vida... Es hermosa esta prueba. Es una de las carreras más duras que corrí. Soy corredora de 1.500 y 5.000 en pista, pero es una carrera que recomiendo porque juntar running y playa es genial», añadió.

Por su parte, Guirado reconoció que había intentado ir a por el récord, pero que no había podido, algo que volverá a intentar en la próxima edición. Además, destacó el crecimiento de la prueba: «Ya somos más de 3.000 y esto está creciendo. Llevo 30 años viviendo aquí y correr en casa con tanta gente es un lujo».

Por último, hay que destacar la presencia de la nadadora Mireia Belmonte y de Álex Roca, que recientemente se convirtió en el primer atleta con parálisis cerebral y un 76% de discapacidad física en completar un maratón.