Campo de fútbol de Can Coix. | Ayuntamiento de Sant Antoni

El alcalde de Sant Antoni de Portmany, Marcos Serra, la concejala de Obras Públicas e Infraestructuras, Neus Mateu, y el concejal de Deportes, Daniel Sánchez, han visitado esta mañana el campo de fútbol 7 del complejo deportivo de Can Coix, tras la finalización de las obras de sustitución del césped artificial y de adecuación de la instalación deportiva.

El proyecto ha incluido actuaciones para la impermeabilización del campo de fútbol, las gradas y la terraza de la cafetería, para dar solución a las filtraciones de agua debajo del campo, así como el cambio y renovación del vallado perimetral y de la red de riego con el fin de garantizar un correcto funcionamiento durante la vida útil del césped. Además, se han habilitado canalizaciones eléctricas en previsión de futuras necesidades.

El alcalde Marcos Serra ha destacado que con este proyecto se renueva un césped que llevaba más de diez años sin cambiarse y que «ha incluido otras medidas necesarias como la impermebealización de terrazas y gradas, la renovación del vallado perimetral y la instalación del riego». «Eran unas obras muy demandadas por los deportistas usuarios de este campo y estamos muy contentos por el resultado» ha explicado el alcalde, que ha detallado que «se ha aprovechado el nuevo drenaje para incluir un sistema de recogida y reutilización del agua que se destinará a riego o limpieza, lo que permitirá optimizar el agua de estas instalaciones».

Por su parte, Neus Mateu ha señalado que la actuación, que ha contado con una inversión de 693.732,82 euros y un plazo de ejecución de seis meses, se ha llevado a cabo debido a que el actual césped, que no se renovaba desde la construcción del campo en 2010, se ha deteriorado con el paso del tiempo. «Los trabajos han permitido corregir la irregularidad superficial, alcanzar unas condiciones óptimas para la práctica deportiva y la correcta gestión y reaprovechamiento del agua vertida en su superficie», ha indicado.

La pista de fútbol de Can Coix tiene una superficie de césped de 59 x 44 metros y ha necesitado la instalación de 2.596 m² de hierba artificial. El nuevo césped, que garantiza unos niveles óptimos de calidad y seguridad para el jugador, es artificial para reducir las labores de mantenimiento y conservación, siendo este tipo de superficies idóneas para campos de entrenamiento, reduciéndose también la necesidad de agua para riego.

Medidas de protección

El concejal de Deportes, Daniel Sánchez, ha explicado que se ha aprovechado la renovación del campo para incluir diferentes medidas de protección, como reducir las medidas del terreno de juego, para incrementar la distancia desde las líneas de juego con los fondos y laterales, instalar protectores en los cuatro postes ubicados detrás de una de las porterías y ocultar el sistema automático de riego bajo el césped. «Estamos muy satisfechos de cómo ha quedado el final de la obra y la instalación del nuevo césped, atendiendo una demanda de clubs y usuarios, que serán los principales beneficiados», ha destacado Sánchez, que ha resaltado que «estas actuaciones permitirán reducir posibles lesiones y disfrutar del deporte de forma segura».