La UD Ibiza sigue a la deriva, mostrándose frágil y poco sólida. Este domingo cayó por segunda jornada consecutiva, esta vez contra el Antequera por 3-1 en un partido para olvidar. El equipo celeste salió completamente dormido en la segunda parte, en la que encajó dos goles en poco más de cinco minutos y tuvo que jugar medio periodo en inferioridad numérica por la posterior expulsión de Escassi. Con este resultado, el conjunto pitiuso ve cómo obtener la segunda plaza es ya casi una utopía dado que el Córdoba venció al Málaga y le aventaja en siete puntos.
Romo dejó por tercera jornada consecutiva a Soko en el banquillo. El técnico unionista ubicó, como era de esperar, a Monjonell y Escassi como centrales ante la ausencia de Pepe, y apostó por Arturo en el doble pivote junto a Tienza. En ataque, Suleiman, Escassi y Gallar formaron la tripleta que acompañaba a Obolskii.
El partido comenzó con un tempranero susto para los celestes. A los tres minutos, un error defensivo permitió a Luismi Redondo correr en solitario hacia el área y acabó disparando al muñeco desde la frontal. La réplica la dio Gallar con un disparo de falta directa en el que trató de sorprender al portero cuando todos esperaban un centro.
Daba la sensación de que el cuadro malagueño se sentía más cómodo sobre el terreno de juego y eso mismo se vio plasmado en el marcador rebasado el cuarto de hora de juego. Luismi Redondo ejecutó un córner al segundo palo y David Rodríguez cabeceó a la red tras la salida de Sequeira a por uvas.
La Udé no encontraba la forma de reaccionar. Le costaba generar acciones de peligro. Le sucedía lo mismo al cuadro local, con la diferencia de que a este le iba bien el resultado. Finalmente, Eugeni se echó al equipo a la espalda y restableció las tablas poco antes del descanso. Tras un primer aviso con una chilena desde la frontal del área que se marchó cerca del palo, el centrocampista aprovechó un pase de la muerte de Unai Medina, en el que Suleiman dejó pasar la pelota, para lanzar un latigazo a la red en el minuto 38. Golazo.
Los andaluces no se vinieron bajo y trataron de recuperar su ventaja en los últimos instantes. Lo intentó Luismi Gutiérrez por partida doble. En la primera ocasión, su disparo desde la frontal lo taponó Unai Medina, en una acción en la que el Antequera pedía mano –fue de rebote–. Poco después, probó con un chut desde fuera del área que Sequeira atrapó sin excesivos problemas, llegándose al descanso con 1-1 en el tanteador.
La segunda parte fue un despropósito de la UD Ibiza, que se cargó el partido en un corto espacio de tiempo. En el 47 se vio de nuevo con el marcador adverso. Chema se topó con una grandísima mano de Sequeira tras un pase de la muerte de Luismi Rodríguez, pero Destiny aprovechó el rechace para marcar con el portero batido. Acto seguido, el propoio Destiny perdonó el tercero. Disparó al larguero en una acción en la que pecó de avaricia.
Con todo, no se demoró mucho el tercero del Anteqeura. En el minuto 51, Luismi Rodríguez le ganó la partida por alto a Unai Medina tras un centro de David Rodríguez y cabeceó la pelota a la red.
El panorama pintaba negro para los celestes, que no habían saltado al campo con el ímpetu y la concentración que requiere un partido de estas características. A Romo no le quedó otra que mover el banquillo. No se había cumplido el primer cuarto de hora cuando decidió dar entrada a Soko y Arroyo por Suleiman y Arturo.
El partido no cambió lo más mínimo. De hecho, se complicó más aún porque Escassi vio la segunda tarjeta amarilla en el minuto 65. La Udé perdía por dos goles y tenía que jugar los 25 minutos restantes más el descuento con un hombre menos sobre el terreno de juego, convirtiéndose así la remontada en una misión prácticamente imposible.
El técnico visitante introdujo más cambios: Olabe y Bobadilla por Gallar y Obolskii. El panorama siguió siendo igual de desolador, con un Antequera que pudo ampliar su renta y acabar goleando a los pitiusos. Ale García se topó con el palo y Prats perdonó un remate franco cerca del punto de penalti al ejecutar un chut raso demasiado flojo. Ya en el descuento, Sousa probó fortuna con un disparo lejano que atrapó Sequeira.
De la UD Ibiza no hubo noticias en ataque. Bastante tuvo con aguantar las embestidas de su rival, que ahondó en la herida de una Udé que ni ganó ni recuperó las buenas sensaciones de la primera vuelta. Este barco sigue estando muy tocado y las cosas van de mal en peor.
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Ahora ya no dais pena,dais dais asco.