El Bulevar Abel Matutes congregó a más de un millar de ciclistas.

La población pitiusa disfrutó ayer de una nueva edición del Día del Pedal, una jornada que sirve para dejar de lado el ruido y la contaminación de los motores para disfrutar de un recorrido por las calles de Vila sobre bicicleta. Y es que este vehículo de dos ruedas no es ideal únicamente en verano, sino también en otoño. El clima acompañó en esta edición, celebrada en una soleada mañana. El chaparrón llegó por la tarde, pero, para entonces, la fiesta había llegado a su fin.

1.576 personas tomaron parte en esta jornada festiva, una cifra ligeramente inferior a la del año pasado (1.602), que contó con tres circuitos distintos en función de la edad. Los adultos fueron los primeros en arrancar sobre las ruedas. A las 11,00 horas y con el Bulevar Abel Matutes como punto de inicio, emprendieron rumbo por diversas calles de Vila hasta completar los nueve kilómetros fijados. 15 minutos después llegó el momento de los infantiles, jóvenes de entre 6 y 10 años que tenían que ir acompañados de adultos para tomar parte en un recorrido inferior, de cinco kilómetros. Por último, a las 11,30 horas llegó el momento más esperado, sobre todo para los padres. No en vano, el circuito ‘baby’ se disponía a hacer las delicias de todos ellos con la participación de los más pequeños, que, obviamente, usaron bicis de cuatro ruedas o triciclos en sus 800 metros de recorrido.

El evento transcurrió sin problemas destacables. Solamente hubo que lamentar un par de caídas, una a la altura de la discoteca Pacha y otra en la misma línea de meta, en la una ciclista cayó al suelo tras frenar de golpe. Fue atendida en este instante y no sufrió lesiones de gravedad.

Los mil primeros inscritos se llevaron como recompensa una camiseta del Día del Pedal. No fue el único obsequio de la jornada, pues también se sortearon diversos premios, entre ellos varias bicicletas.

«Una vida saludable»

Mar Sánchez, regidora de Deportes del Ayuntamiento d’Eivissa, estuvo presente en el Día del Pedal. De hecho, completó el recorrido para los adultos. «Ha sido una jornada lúdico-festiva para que la gente que tenga la bicicleta en casa la pudiera sacar y disfrutar. Se trata de hacer deporte y tener una vida saludable», comentó Sánchez, que no ocultó su temor por que las inclemencias meteorológicas hubieran podido evitar la cita: «Me pasé toda la mañana mirando el tiempo por Internet, pero al final hemos disfrutado de un día soleado por la mañana».