Los trabajos que se están llevando a cabo en el núcleo urbano de el Pilar de la Mola están ocasionando problemas en el tráfico. Coinciden las obras de embellecimiento del centro con la llegada de agua potable desde Sant Ferran, así como la instalación de tuberías para la evacuación de aguas residuales hasta la depuradora de Sant Francesc.
Aunque los cortes son parciales y no se mantienen por la noche, sí suponen problemas y dudas a los conductores que al llegar a la Mola se encuentran en muchos casos con que son desviados de una forma un tanto aleatoria por el camino de las escuelas, obligados a cruzar el camí de sa Talaiassa y proseguir por la calle Àngela Ferrer hasta salir a la plaza que hay entre el cementerio y la iglesia.
A veces se obliga al microbús de línea a desviarse y otras no. El conductor explicaba que no entiende por qué le dejan pasar sin desviarse y, en cambio, al coche que va detrás le obligan a dar la vuelta por otras calles pese a ser vehículos más pequeños.
Sea como fuere, los trabajos de embellecimiento del núcleo de el Pilar van para algunos «muy despacio aunque tienen mucha y muy buena maquinaria», mientras que los escépticos piensan que llegará la temporada y «todo seguirá patas arriba». Oficialmente el Consell de Formentera mantiene que se están cumpliendo los plazos previstos. Pese a todo vecinos de la Mola se quejaron que durante el período navideño no se trabajó ni un solo día aunque en trabajos de peatonización de Sant Francesc sí se trabajaba. «Es una cuestión de las empresas adjudicatarias de las obras», dijo en su día el conseller de Infraestructuras, Bartolo Ferrer.