Una imagen de la primera reunión que celebró el Consell de Govern el 5 de julio. | Jaume Morey

Han transcurrido 70 días entre la primera reunión del Govern de la nueva legislatura (el 5 de julio) y la que se celebró el pasado viernes y aprobó tres acuerdos, entre ellos el nombramiento de un director general.

En estos 70 días, de los que hay que descontar dos semanas de vacaciones en agosto, de las reuniones del Ejecutivo han salido 42 acuerdos, incluidos los referidos a la configuración de su organigrama y los nombramientos. No se ha aprobado ninguna ley, sí dos decretos (uno de ayuda a las víctimas de la violencia machista, que se completo con la extensión del servicio de asistencia a víctimas de manera permanente, y otro que declaraba de utilidad la lucha contra la plaga de la xileia) y se ha interpuesto un recurso contra el Gobierno central por los límites del parque de Cabrera. El resto de acuerdos tienen que ver con proyectos iniciados, pagos, desarrollo de planes o medidas o autorizaciones de gastos.

«Llevamos cuatro años gobernando, este Govern es una continuación del anterior y no necesitamos ningún proyecto estrella que marque un inicio de legislatura», explican a este diario desde el Consolat de Mar.

Plan Económico-Financiero

Después de la reunión del pasado viernes, la consellera de Presidencia, Pilar Costa, explicó que «estamos al inicio de la legislatura y salimos del mes de agosto en que la Administración se ralentiza». Restaba así importancia a posibles críticas sobre la falta de impulso del Ejecutivo tripartito que gobierna Balears.

«Hay cuestiones que pueden parecer menores y no lo son», explica Costa que incidió en que la Administración funciona y que en cada reunión se toman medidas que afectan a la ciudadanía.

Lo que sí admite tanto la consellera como otras fuentes del Ejecutivo es que están condicionados por la falta de acuerdo estatal y que primero tienen que cerrar su plan económico financiero y presentar el Presupuesto.

La presidenta Armengol comparece mañana en el Parlament durante una sesión que estará marcada por el debate sobre la situación económicas y la relación con Madrid.