Los funcionarios de diversas administraciones salieron a la calle en la época de los gobiernos de Mariano Rajoy y José Ramón Bauzá. El Govern de Armengol ha ido recuperando buena parte de aquellos ajustes a los funcionarios. | J. TORRES

Los 34.000 funcionarios del Govern balear se quedan este año con el sueldo congelado. El Ejecutivo comunicó ayer a los representantes sindicales que sus nóminas no notarán el incremento del 2 por ciento que prevé el Gobierno central y que de esta forma ahorrará 36,27 millones de euros.

De hecho, sí habrá una subida parcial del 2 por ciento en la parte estatal de sus nóminas, el sueldo base y los trienios, pero esa misma cantidad se les rebajará después en los complementos autonómicos que paga el Govern, como pueden ser la carrera profesional o los complementos específicos, de productividad o de destino.

Mesa General

El anuncio se realizó en la Mesa General del Empleado Público que se convocó ayer por la tarde y en la que estuvieron presentes las conselleres d’Hisenda, Rosario Sánchez, y d’Administracions Públiques, Isabel Castro. La intención del Ejecutivo es poder aprobar el acuerdo en el Consell de Govern de hoy mismo, aunque el Ejecutivo deberá presentar un proyecto de ley al Parlament ya que se modifican complementos salariales. Esta norma deberá presentarse antes del 31 de diciembre de este año.

El Govern ha justificado esta congelación ‘de facto’ de los sueldos en la necesidad de contratar a más empleados públicos en sanidad y educación para hacer frente a las necesidades de la COVID-19. De hecho, ya se ha contratado a 900 profesionales de sanidad y a partir de septiembre se incorporan otros 458 profesores al sistema educativo balear. También se prevé contratar a otros 40 rastreadores.

La partida de personal de la Comunitat ha aumentado un 33 por ciento en los últimos cinco años. El último Presupuesto aprobado por José Ramón Bauzá sumaba 1.260 millones de euros.

Gasto actual

El gasto será este año de 1.687 millones tanto por el aumento de personal como por la recuperación de parte de los complementos que recortó el PP. La plantilla de empleados públicos ha pasado de 30.000 a 34.000 trabajadores y el sueldo medio de cada funcionario ha aumentado un 12 por ciento en este mismo periodo: unos 300 euros al mes.

La congelación ‘de facto’ no será definitiva ya que el Govern comunicó a los trabajadores que, cuando el PIB balear llegue a los niveles previos a la epidemia de coronavirus, se aplicará la subida que les corresponde con efecto retroactivo. El Ejecutivo recuerda que las previsiones económicas para este año son muy complicadas hasta el punto de que la AIReF prevé una caía del PIB del 30,1 por ciento en un año.

Un incremento salarial que se pactó en la época de Montoro en el Ministerio

El incremento salarial de los funcionarios vinculado al crecimiento del PIB fue una de las últimas decisiones de Cristóbal Montoro como ministro de Hacienda antes de la moción de censura que aupó a Pedro Sánchez a la Presidencia del Gobierno. El acuerdo sigue vigente desde entonces porque el actual Gobierno no lo ha cambiado.

Su sucesora, María Jesús Montero, trabaja ahora en la elaboración de los Presupuestos para 2021, lo que puede suponer alguna modificación a aquel acuerdo. De hecho, el Gobierno de Pedro Sánchez gobierna con los Presupuestos que se aprobaron cuando Montoro era aún ministro. Otra ‘herencia’ que persiste de Montoro es la polémica ley que obliga a los municipios a no gastar el remanente y que ahora ha utilizado Montero para conseguir financiación.