Patricia Guasp y Maxo Benalal, en el Parlament. | P. Pellicer

El secretario nacional de Organización de Cs, Borja González, sospecha que detrás de los movimientos en el grupo parlamentario de Cs en Balears hay una «ambición personal desmedida» por parte del diputado Maxo Benalal, secretario segundo de la Mesa del Parlament.

Cs ha abierto un expediente informativo a tres de los cinco diputados de la formación en el Parlament por promover el cambio de portavoz en el grupo en contra del criterio de la dirección nacional y regional de Balears. Son Marc Pérez-Ribas, Jesús Méndez y Maxo Benalal. En este último caso se ha aprobado, además, una suspensión cautelar de militancia ya que al problema con el portavoz se añade el hecho de que el Parlament reclama 15.000 euros a Benalal por el cobro irregular de dietas durante 2020. Si no se reconduce la situación, Borja González alerta de que los expedientes pueden acabar en expulsión de los tres diputados.

El partido cree que es Benalal quien «está arrastrando a otras dos personas», los diputados Marc Pérez-Ribas y Jesús Méndez. González ha defendido que tanto Pérez-Ribas como Méndez «a priori estaban plenamente alineados con el comité autonómico»

Según el secretario general de Organización, «no es un problema político» sino «una cuestión de ambición personal desmedida». González añadió que «tomar una decisión unilateral» para «revertir el mandato de la dirección» y los votantes «no parece una opción correcta».

«Entendemos que puede ser algún tipo de bomba de humo», apuntó, ante un «supuesto abuso» en el cobro de dietas detectado por el Parlament.

Tolerancia cero

González expresó «tolerancia cero frente a este tipo de comportamientos» y sugirió que «intentar cambiar por la puerta de atrás» a la portavoz «quizá responde a otro tipo de movimiento». Si el expediente abierto termina con la expulsión de Benalal del partido, ello no conllevaría de forma automática la expulsión del grupo parlamentario.

El Reglamento del Parlament marca que, para que un diputado pase al Grupo Mixto, su grupo parlamentario original debe acreditar que la decisión de expulsarlo fue acordada por al menos mayoría absoluta de los miembros. «Me cuesta mucho creer que los dos diputados vayan a hacer seguimiento de esa conducta que no responde a ningún criterio lógico», comentó González.

Si Benalal es expulsado del partido, éste le exigirá que entregue el acta de diputado y abandone el Parlament. González lamentó que el comportamiento del diputado «tiene especial repercusión social contra Ciudadanos».