Rosario Sánchez, en la presentación de los presupuestos este jueves. | Jaume Morey

El proyecto de Presupuestos del Govern para el año que viene, los más altos de su historia, serán también los de mayor esfuerzo de inversión pública que realizará el Ejecutivo desde que existe. Las cuentas, que suman 6.397 millones de euros, destinarán 940 millones de euros a inversiones directas, una cifra nunca vista en las Islas en un solo año.

Las políticas sociales siguen llevándose el grueso del Presupuesto y a ellas se destinarán el año que viene 3.611 millones.

El Consell de Govern aprobó ayer el proyecto, que ahora enviará al Parlament para su tramitación, con importantes novedades y un giro de timón con respecto a lo que han sido las cuentas del Ejecutivo de Francina Armengol desde que asumió el poder en 2015.

La nueva política
Si los primeros presupuestos fueron los de la recuperación de derechos de los trabajadores públicos y los del refuerzo de las políticas sociales, con aumento de las partidas de sanidad, educación y servicios sociales, los de 2022 serán las cuentas que inician una nuevo periodo de inversión pública. Las inversiones han sido prácticamente inexistentes en los seis años de gestión de Francina Armengol, primero por la falta de recursos de los primeros años del Pacte y después por el estallido de la pandemia, pero ese timón da un giro en el proyecto aprobado ayer.

«Abrimos un ciclo inversor sin precedentes como palanca de crecimiento y mejora del modelo productivo», dijo la consellera d’Hisenda, Rosario Sánchez, en la presentación de las grandes cifras de las cuentas. La consellera no detalló a qué se destinarán esas inversiones ya que eso es algo que se conocerá cuando las cuentas entren el Parlament. Sí se sabe que hay 608 millones de euros para la mejora del modelo productivo, de los que medio ambiente se llevará 192 millones y movilidad, 157,9. Es muy probable que el proyecto de tranvía a Son Espases figure en las cuentas.

En resumen y para hacerse una idea del notable esfuerzo del Govern, el presupuesto destinado a inversiones crece un 34 % y el destinado a políticas sociales, un 8 %.
¿Y de dónde sale esa cantidad ingente de dinero que manejará el año que viene el Govern, que suman 500 millones más que este año? Hay tres fuentes extraordinarias de financiación que explican este notable incremento. Por un lado está la financiación que llegará a través de los fondos europeos y que supone una inyección de 311,7 millones de euros.

A esta vía se la suma la gran novedad de estas cuentas: la aparición de los 183 millones procedentes del factor de insularidad como consecuencia de la aprobación del REB. Es la primera vez que los Presupuestos autonómicos incluyen esta partida pensada para compensar la insularidad, si bien una parte es dinero no pagado en 2021.

La tercera vía extraordinaria de financiación está en la progresiva recuperación económica tras la pandemia. El Govern calcula que habrá más actividad económica, lo que hará que los ciudadanos y las empresas paguen más impuestos. Un ejemplo: en el caso del impuesto de transmisiones patrimoniales la previsión de crecimiento es del 63 %.

En el apartado de gastos, la partida más importante es la de personal, a la que se dedican 1.846 millones del total. Supone un aumento del 4,2 % con respecto a este año. También destaca la partida de pago de deuda a los bancos, que suma un total de 1.221 euros. El Govern apenas reserva 79,4 millones para el fondo de contingencia.