Patricia Guasp, candidata de Ciudadanos a la presidencia del Govern balear.

La portavoz nacional de Ciudadanos, Patricia Guasp, considera que la fuga de cargos ‘naranjas’ al PP es «transfuguismo» si los que se han ido mantienen sus actas, y por tanto «una forma de corrupción política» que debería penalizarse. Además, afea al PP basar su política de fichajes en esta práctica: «No es jugar limpio», remarca.

La convocatoria de las elecciones del 28M ha acelerado la ‘sangría’ de abandonos y bajas de Ciudadanos en todo el territorio español. El enésimo ejemplo son los concejales madrileños Pepe Aniorte y Ángel Niño, que se han dado de baja de la formación ‘naranja’, entre rumores de fichaje por parte del PP.

Tras la dimisión de Albert Rivera por la debacle de las generales de 2019 ya hubo una primera oleada de bajas en Ciudadanos, pero la crisis de Murcia agravó la situación y desde entonces se han ido intensificado las fugas, animadas por la política de fichajes del PP. La dirección de Pablo Casado captó a Fran Hervías, que había sido responsable de Organización de Rivera, y durante meses fueron reproduciéndose los trasvases a las filas populares. El trasvase de concejales de Ciudadanos a otros partidos es muy común, siendo el PP el destino principal, aunque no el único.