El mundo opresivo de «La casa de Bernarda Alba» de Federico García Lorca tendrá a las nueve de esta noche en el escenario de Can Ventosa acento cubano. Un elenco de 25 actores de la compañía Hubert de Blank (filial del Teatro Nacional de Cuba), encabezado por Orieta Medina, directora general del grupo (Bernarda), darán vida a este drama rural sobre la represión de la mujer andaluza. El precio de las localidades es de 2.500 pesetas.

La compañía Hubert de Blank está integrada por conocidos directores, actores y diseñadores, muchos de los cuales han ofrecido cursos, talleres y clases magistrales en Cuba y en el extranjero. Desde su nacimiento en 1958, su repertorio lo conforma destacadas obras de la dramaturgia universal y clásica, con énfasis en la cubana.

Este montaje de «La casa de Bernarda Alba», bajo la dirección artística de Berta Martínez, tiene un planteamiento escénico en el que predomina la sobriedad. En un espacio desnudo, al fondo, un ciclorama negro iluminado, con franjas imprevistas de luz que cruzan el escenario, el proscenio con el aspecto de un altar profano, sin muebles ni objetos, es el marco en el que se desarrolla esta tragedia de principio de siglo.