Fanny Tur (en la imagen junto a la iglesia de sa Tanca Vella) visitó esta semana Formentera para reunirse con los representantes del Consistorio de la isla.

GUILLERMO ROMANÍ/PEP TUR La consellera de Cultura del Consell Insular d'Eivissa i Formentera, Fanny Tur, anunció en su reciente visita a Formentera, junto a los responsables municipales, que las obras de remodelación del antiguo instituto de Sant Francesc Xavier, destinadas a convertirlo en un Centro Cultural Polivalente para la isla, darán comienzo el próximo año al finalizar el presente curso escolar.

Según las reuniones mantenidas por la consellera en Formentera, el uso de este inmueble continuará como hasta ahora provisionalmente hasta el verano del 2000. Las obras darían comienzo, según Tur, entre los meses de agosto y septiembre.

La financiación para estas obras de adecuación correrá a cargo del Govern balear, el propio Consell Insular y el Ayuntamiento de Formentera. El proyecto para la ejecución de este proyecto cultural ya está redactado y desde el Consistorio formenterés se ha valorado «muy positivamente» que la máxima institución pitiusa haya respetado el modelo y la filosofía del futuro Centro Cultural Polivalente.

En un principio, el proyecto contemplaba la ubicación en el antiguo instituto de Sant Francesc Xavier, además de las infraestructuras culturales, unas dependencias destinadas a albergar diversas oficinas administrativas del Consell Insular. Este factor contó con la oposición de la Coalició d'Organitzacions Progressistes (COP). La coalición consideró prioritario desde un primer momento que el antiguo instituto debía ser dedicado íntegramente a equipamiento cultural.

Según esta premisa, el inmueble debe albergar la futura biblioteca, el hotel de entidades formenterenses, una sala polivalente que permita celebrar congresos y conferencias y espacios que puedan albergar exposiciones y escuelas.

Los primeros planos de distribución de espacio para el Centro Cultural fueron presentados por el anterior conseller de Cultura, Joan Marí Tur, en octubre de 1998. El edificio, propiedad del Consell Insular, quedaba entonces dividido entre las dependencias administrativas del Consell y los espacios culturales solicitados por el Ayuntamiento de Formentera. Un proyecto que ahora ha sido modificado.