La razón por la que la dirección del Sharjah Arts Museum del Golfo de Omán, en los Emiratos Àrabes Unidos (UAE), la haya invitado a participar en un proyecto de promoción del arte europeo, es algo que se le escapa a Eva-Maria Reiner-Wilke. «No sé por qué me han seleccionado; es un misterio. Supongo que algún pintor o algún crítico habrá visto cosas mías aquí o en Alemania y me ha recomendado», explicó la artista alemana, quien desde hace varios años vive y trabaja a caballo entre su país natal y Santa Eulària.

La invitación le llegó el pasado noviembre, y en enero envió un dossier acerca del trabajo que pensaba presentar en ese Estado árabe. Los artistas seleccionados mostrarán en dicho museo exposiciones individuales o colectivas. «Por mi parte llevaré una muestra individual, de carácter no figurativo, algo prohibido por la religión en los países árabes.

Por eso me ha parecido oportuno exhibir 45 cuadros de la serie 'Monocromes', algunos de los cuales ya presenté aquí en la isla hace unos meses», explicó Reiner-Wilke, quien desconoce todavía la fecha en la que tendrá lugar su presentación. «La fecha no está fijada, será dentro de unos meses; es que la organización es muy lenta y hay que tenerlo todo muy preparado».

En cualquier caso, la imprevista invitación ha satisfecho un deseo que la artista alemana tenía desde hace tiempo. «Estoy encantada, porque ir al desierto, sentirlo, ha sido uno de mis sueños más deseados desde años. Así que aprovecharé la ocasión para pintar las impresiones que me produce el desierto, una experiencia estética y sensible que estoy segura marcará un cambio respecto a lo que he hecho hasta ahora».