El auditorio de Can Ventosa acogerá a las nueve y media de la noche del próximo sábado día 23 la representación de «Madame Raquin», adaptación libre de Manuel Collado para el teatro de la novela de Emile Zola «Therese Raquin». Julia Gutiérrez Caba protagoniza este melodrama del siglo XIX en el que con la técnica de un «thriller» moderno se enfrentan instintos primarios con sus secuelas de amor primitivo, pasión, odio, angustia, terror y venganza. Junto a la reconocida actriz, intervienen en la obra otros dos veteranos maestros de la escena española, Manuel Tejada y Juan Antonio Quintana. Completa el reparto la joven Paula Sebastián, conocida del gran público por sus intervenciones en series de televisión como «Segunda Enseñanza», «Médico de familia» o «El Comisario». El responsable del montaje es Gerardo Malla, actor de reconocido talento, quien desde 1974 alterna su trabajo sobre las tablas con la dirección de espectáculos teatrales.

Ganadora de un Goya como mejor actriz por su trabajo en la película de José Luis Garci «You're the one», Julia Gutiérrez Caba interpreta en «Madame Raquim» a una de las grandes heroínas de la narrativa de Emile Zola, padre del Naturalismo francés. Dividida en tres cuadros, la obra mezcla el suspense y el misterio con un teatro psicologista que se entronca con la teorías de Freud. El asesinato del hijo de Madame Raquim sitúa en escena a cuatro personajes representativos de la parisiense burguesía media de mediados del siglo XIX. «Me atraía hacer un estudio de caracteres, que es el pilar del teatro en el que me encuentro bien trabajando las interpretaciones de los actores. Sin construir arquetipos, trato de explicar a esos personajes; por qué asesinan, por qué aman, por qué odian, por qué se sienten culpables», ha afirmado el director de la obra. «Todos llevamos un criminal dentro, aunque la represión inconsciente a veces impida que se muestre; es decir, todos en general podemos ser seráficos o asesinos», añadió.

Para la veterana actriz, «Madame Raquim» «es uno de los papeles más interesantes con los que me he topado. Es una personalidad muy rica y fuerte que afronta las adversidades; además, resulta muy interesante como representación de aquellos años». Un asesinato pasional, un adulterio por medio y unos instintos reprimidos que juegan malas pasadas a algunos de los protagonistas son las claves de una obra que ha merecido el aplauso de la crítica y el público a lo largo de la gira que la está llevando por todo el territorio nacional. Una pieza desgarrada con el sello inconfundible de un autor de tendencias socialistas, lo que añade un componente particular de crítica a la burguesía de la época; un texto en el que Zola pone de manifiesto el poder imparable del instinto de la sangre cuando clama venganza.