Las excavaciones arqueológicas previas a las obras de la Avenida de España no han dado sorpresas. Fotos: KIKE TABERNER

El Ayuntamiento de Eivissaha finalizado las excavaciones arqueológicas que se han realizado en los últimos meses en la Avenida de España y ha realizado el informe correspondiente, que será presentado ante la Conselleria de Patrimoni para que la Comisión de Patrimonio los estudie y determine si se ha de adoptar alguna nueva medida. En principio, y con el objetivo de no retrasar más los trabajos de reforma de esta fundamental vía de acceso a la ciudad, el Ayuntamiento confía en reiniciar las obras tras Navidad.

Los informes técnicos destacan la aparición de una cisterna púnica, probablemente de una vivienda, y restos de una posible instalación de alfarería, más vinculada al uso doméstico que industrial. Además, el espacio estudiado tiene tres canalizaciones orientadas hacia el norte que llevarían agua de la zona sur (Puig des Molins). Estos trabajos han sido dirigidos por la arqueóloga y técnica municipal Rosa Gurrea, que ha contado con la colaboración de tres arqueólogos más. También han participado en los mismos un antropólogo, los alumnos del Taller de Restauración del Ayuntamiento, personal voluntario y trabajadores de la empresa contratada para realizar la reforma de la Avenida.

Según el informe, los restos arqueológicos hallados no tienen valor monumental debido a que todos los elementos corresponden a partes ocultas de las edificaciones originales, ya que toda la excavación se ha realizado por debajo de los niveles reales de ocupación, los cuales se encontraban totalmente arrasados, probablemente desde épocas remotas.

El área que se ha excavado en las últimas semanas tiene una superficie de 26 metros de largo por 10 de ancho; aunque los restos han aparecido concentrados en una franja de 6 metros de ancho que coinciden con la parte central de la calzada. Las excavaciones se comenzaron por medios mecánicos, con el fin de retirar las capas asfálticas de la calle, para pasar seguidamente a ser realizada manualmente.

Por su situación en el centro de la ciudad y por lo singular de los trabajos, en un principio llamaron mucho la atención de los ciudadanos. Sobre todo a raíz de los resultados de las primeras catas, donde aparecieron restos humanos que por la posición de su enterramiento parecían corresponder a la época árabe, aunque aún no se ha confirmado tal extremo.