EFE|CANNES

La 57ª edición del Festival Internacional de Cine de Cannes, considerado el más importante del mundo, se inicia hoy en medio de estrictas medidas de seguridad y con una sección oficial más variada y, a priori, más interesante, que la de los últimos años. El cine en español será importante en el apartado oficial del certamen, no solamente por el largometraje de Pedro Almodóvar «La mala educación», que abre hoy el festival, sino por la cinta de la argentina Lucrecia Martel «La niña santa», que llega avalada por excelentes críticas de su país de origen.

Aparte de Lucrecia Martel, la vitalidad latinoamericana estará representada en la sección a concurso por el brasileño Walter Salles, con su «Diarios de motocicleta», inspirada en los años de juventud de Ernesto «Che» Guevara.

Como en ediciones anteriores, Francia y EE UU, con tres filmes cada uno, ocuparán el primer puesto en número de películas seleccionadas para competir por la Palma de Oro. Les siguen en número para conquistar el preciado trofeo Corea del Sur, con dos cintas, «Old Boy», de Park Chan-Wook, y «La femme est l'avenir de l'homme», de Hong Sang Soo; y Japón, con «Nobody Knows», de Kore-Eda Hirokazu, e «Innocence», de Oshii Mamoru. Procedentes también de Extremo Oriente se proyectarán «Tropical Malady», del tailandés Apichatpong Weerasethakul, y «2046», del chino Wong Kar-Wai. Francia competirá con «Exils», del cineasta gitano de origen argelino Tony Gatlif, que la rodó parcialmente en España; «Clean», de Olivier Assayas, y «Comme une image», de Agnes Jaoui. Las otras cintas europeas en competición son «Le conseguenze dell amore», del italiano Paolo Sorrentino, y «Edukators», del alemán Hans Weingartner.