J. HERRANZ

El salón de Ebusus acogerá a las 20,00 horas de mañana viernes la presentación de «Confesiones de un diplomático. Del 11-S al 11-M», de Inocencio Arias, publicado en la editorial Planeta. «Hay muchas razones para presentar el libro en Eivissa; la fundamental es porque el ministro Matutes fue la persona que me envió a la ONU, pues fue quien propuso mi nombre a Aznar», explicó ayer a este periódico el diplomático. «Matutes se portó conmigo como un caballero, y le estoy muy agradecido por ello, desde luego», añadió.

Su intención primera era que estas «confesiones» fueran presentadas por Abel Matutes, «pero desafortunadamente no va a poder ser porque tiene una boda; y yo no puedo cambiar las fechas por compromisos previos», apuntó Arias, añadiendo que la editorial «me dirá hoy quien me presenta finalmente», precisó Inocencio Arias, quien suele visitar Eivissa a menudo. «Voy mucho en verano, pero lamentablemente pocos días, por falta de tiempo», subrayó.

Inocencio Arias dijo que el libro, que está presentando en estos días por toda la geografía nacional, «está siendo muy bien recibido. Me suelen decir algún que otro piropo, como que está escrito de forma amena y desenfada; algo que siempre es de agradecer», apuntó este singular personaje, quien se considera «un diplomático transversal y ecléctico. He tenido mucha suerte, porque he desempeñado cargos de cierto relieve con los tres gobiernos de la Democracia. Y curiosamente, con este PSOE estoy relegado; pero con el de Felipe González fui secretario de Estado, lo más alto que puede llegar un diplomático en la casa, porque es el puesto que hay debajo del ministro».