Los tres actores que protagonizan la obra, ayer por la tarde, en el ensayo general. g Foto: MARCO TORRES

Una noche de San Juan facilita el romance entre la Señorita Julia y un sirviente. Y a partir de entonces, nada será igual entre estos dos personajes que comienzan sus peripecias para averiguar cómo seguir adelante con una relación, en la que interfiere un doble juego social de discriminación de clases y de género.

«El que quiera ver un drama pasional, fuerte y bonito ahí lo tiene, y si lo que se quiere es buscar más fondo, también hay», aseguró la directora Merche Chapí, sobre la obra maestra del dramaturgo sueco August Strindberg (1849- 1912), cuya versión se podrá ver esta noche, a las 21'30 horas, en el auditorio de Can Ventosa.

Para ello, dos protagonistas, una actriz secundaria, y diez extras, inaugurarán esta fiesta que termina en un drama con trasfondo social. «Con esta obra, Strindberg trata de mostrar la inferioridad de clase en cuanto al sirviente con respecto a la señora, con la que se ha enrollado, pero luego da una doble vuelta y muestra una inferioridad como sexo, de la mujer ante el hombre. Es un doble juego social», explicó la directora, que para esta puesta en escena cuenta con la colaboración de un elenco numeroso, algo poco común en otras versiones o representaciones de Señorita Julia. «Estos personajes no suelen salir porque una compañía no tiene tantos actores. Pero como yo tengo la escuela de teatro, hemos echado mano y salen como diez sirvientes», agregó. Se trata de sirvientes que animan esa noche de San Juan que sube el telón a la versión de Chapí, para una obra que se podrá volver a ver mañana y el viernes, también a las 21'30 horas.

Los intérpretes son alumnos y ex alumnos del Grup Amateur de Teatre, un grupo que ofrece su quinta y última representación del 2007. Y lo hace con un clásico, toda una invitación para los amantes y también para los perezosos de la literatura. «Porque sólo por ver un clásico sin tener que leerlo, ya vale la pena venir», concluyó.