El polifacético artista Diego Picabea Oliveira se alzó ayer con el Premi Can Pou de artes plásticas en su primera edición, dotado con 2.000 euros. El fallo del jurado se dio a conocer ayer durante la inauguración en la galería Via 2 de la exposición de las obras de los doce finalistas del galardón, organizado por el bar-galería que le da nombre y en el que han participado en torno a 130 creadores, la mayoría residentes en Eivissa.

Picabea Oliveira tiene 37 años, es uruguayo y reside en Eivissa desde hace cinco años. «El trabajo que presenté buscaba un lenguaje propio, porque con tanta oferta que hay hoy día en arte, me gusta diferenciar. La obra (sin título) tiene referencia a mis gustos artísticos: cine, fotografía, escenografía, pintura... Pretendía hacer la síntesis de lo que me gusta en arte en todas sus expresiones», explicó ayer a este periódico el artista, quien, aunque estudió «algo de arte de pequeño», se definió más bien «como autodidacta».

La elección de la obra de Diego Picabea fue por unanimidad del jurado, formado por Paco Romero, Àngel Lloreda, Carles Fabregat y Pep Tur. «La selección final se intentó que fuera variada, lo que no resultó fácil entre tantas obras y de tantos géneros. Entre las doce finalistas están representadas la pintura, la fotografía, el vídeo, las técnicas mixtas, y la pieza que ganó, que no sabíamos bien donde encajarla, porque tiene forma de escultura, tiene algo de arte visual, algo de pictórico... Es difícil de clasificar. Pero eso sí, el premio lo dimos por unanimidad, sin discusión», señaló Pep Tur.