Miriam Vellacott y Laia Dell'Olmo.

JULIO HERRANZ

La compañía Antaviana, formada por Laia Dell'Olmo y Miriam Vellacott, está preparando una obra sobre cuentos de las Islas y Catalunya para la próxima edición del festival de teatro infantil y juvenil El Festín, que se celebrará en junio en Sant Josep. Un montaje que será el resultado del taller de teatro para niños entre 12 y 13 años que están realizando con subvención del Ayuntamiento josepí. Se trata de una adaptación de Leyenda de Cucao, una obra basada en la mitología de Chiloé, una isla del sur de Chile, que estrenaron en 2007 al concluir un mes de residencia artística en el Museo de Arte Moderno de Chiloé. «El proyecto está yendo muy bien y lo estamos viviendo intensamente con el entusiasmo, humor y fantasía que los niños dan espontáneamente y de forma gratuita sin darse cuenta. Esta siendo una experiencia muy bonita», resumió a este periódico Laia Dell'Ollmo, ibicenca criada en Barcelona, que hace diez meses regresó a su isla tras vivir muchos años en Inglaterra.

Precisamente fue en Londres donde se conocieron hace seis años Laila y Miriam, mientras estudiaban en la International School of Corporeal Mime. Un centro creado en Francia por el reconocido mimo Etienne Decroux, trasladándose más tarde a Inglaterra y al frente del cual están sus asistentes, Steven Wasson y Corinne Soum. «Llegué al teatro y al mimo al final de tercer año en Londres, tras trabajar con niños en escuelas Waldorf. Fue entonces cuando empecé a buscar una forma de expresión artística visual y sugerente», apuntó la parte ibicenca de Antaviana, añadiendo: «Para Miriam, que estudió piano y teatro, la expresión corporal tiene una fascinación desde su niñez, vivida en dos lugares y culturas distintas, Finlandia e Inglaterra, países de origen de sus padres. Para ella, el mimo es como la música; poesía del sonido y del movimiento».

Fue en el tercer año de mimo, durante los ensayos de la obra de graduación cuando se dieron cuenta que existía entre ellas «una complicidad muy grande en la forma de trabajar. Así es cómo aún nos encontramos, complementándonos cada vez en creaciones conjuntas. En el escenario, vamos a la búsqueda intuitiva de una atmósfera que ha ido tomando más fuerza y solidez con el tiempo y la experiencia, buscando la magia irreal que se destapa en escena y es la esencia del teatro», precisó Laia Dell'Olmo, portavoz de esta entusiasta y creativa pareja teatral.

En cuanto a la 'cocina' de los montajes de Antaviana, «nos gusta utilizar viejos objetos, dándoles un papel en el escenario y no delegándolos simplemente a elementos del decorado. También usamos máscaras de todos los tamaños, que hacemos nosotras». Elementos que encuentran en los lugares donde trabajan, como ahora y aquí las redes de pescar. «Nuestros universos escénicos contienen una atmósfera onírica que nos empuja a viajes imprevistos, pero que quieren, sobre todo, sorprender y despertar la imaginación del que los ve».

Otros proyectos

Además del proyecto que Antaviana presentará en El Festín, la compañía está ensayando su segunda obra, Una piedra en mi zapato. «Esta creación tiene mucho que ver con el momento personal del retorno a lo que forma la identidad de cada uno. El sentido del viaje al lugar de la infancia está muy arraigado en las dos. La obra se centra en dos personajes y su relación, la historia del niño interior que cada uno conserva y que se ha ido diluyendo en esa otra persona que adoptamos en la vida adulta; aunque la esencia sigue estando dentro. Se desarrolla en una buhardilla, que más allá del espacio físico, refleja un universo interior mostrado con la evolución de dos niñas que crecen juntas, espejos una de la otra», explicó Laia, añadiendo: «Nos gustaría hacer una adaptación para teatro de calle y presentarla en el Festival de Teatro de Edimburgo, incorporando la idea de una muñeca que cobra vida en la imaginación de una niña; y explorando el juego de aparecer y desaparecer que ofrece un baúl que guarda universos en su interior: un velero, una muñeca de trapo, una luna... Como si fuera la caja de un mago. Actuando en la calle, el baúl cumpliría la función de único escenario».

Y aún otro proyecto más, Tree Talk, «una propuesta de Saara Nelson, actriz inglesa-finlandesa con quien Miriam ha trabajado en Londres. Sería con artistas internacionales, creando imágenes de árboles que buscan su parecido en cuerpos humanos. Estamos a la espera del patrocinio del British Council», concluyó Laia Dell'Ollmo.