Txè Aymat (Mataró, 1963) junto a algunas de sus joyas que presenta en la exposición que inaugura hoy en la galería Via 2. Foto: MARCO TORRES

La galería Via 2 de Eivissa acogerá a partir de las 20,30 horas de hoy martes la inauguración de una exposición de Dibuixos i Joies de Txè Aymat (Mataró, 1963), que estará abierta al público hasta el próximo día 12. Será la primera vez que este dibujante, diseñador y pintor catalán, que se define a sí mismo como creador «neomodernista», presente sus trabajos en la isla. Una selección de 30 joyas con unos 40 dibujos previos, que tienen como complemento unas serie de esculturas de Àngel Heredero Bravo, amigo suyo, ubicadas en huecos de los muebles expositores de las joyas, realizados por el propio Aymat.

El responsable de la galería Via 2, Toni Torres Font, se mostró ayer «encantado» de poder dar a conocer en Eivissa la obra de Txè Aymat. «Me he quedado gratamente sorprendido con una obra que no es sólo artesanía, sino auténtico arte», precisó el galerista ibicenco, añadiendo que es la primera vez que exponen joyas en este espacio de la Vía Púnica.

Por su parte, Aymat (hijo del pintor catalán residente en Eivissa Adolf Aymat) explicó por encima el proceso de creación de sus joyas únicas: «Empiezo dibujando primero la joya en papel, que a veces me lleva más tiempo que hacer la pieza». Dibujos que en algunos casos llevan anotadas indicaciones técnicas y otras consideraciones para su realización, con materiales que pueden ser plata, oro o piedras; especialmente el ópalo; sobre todo uno descubierto recientemente en Etiopía que tiene la llamativa singularidad que cambia de tonalidad en contacto con el agua.

Influencias y nexos
Txè Aymat reconoció sin ningún tipo de complejos que en su creación se notan las huellas de numerosas influencias, empezando por el modernismo y su variante francesa del art nouveau, y abriéndose a territorios como el arte egipcio, azteca o maya, sin negar influencias de la cultura contemporánea; desde el cómic al realismo mágico de la literatura o el mundo del cine. Influencias que a veces se manifiestan con cierto toque irónico. «Me voy haciendo mi bestiario personal con todo lo que me interesa y me llama la atención. En ese sentido puedo absorber de todo, soy como una esponja», reconoció este creador todo terreno, incluidos los del muebles y la forja.

De formación autodidacta, por su afán curioso e inquieto que desbordaba el coto académico, Txè Aymat abandonó sus estudios en la Escola Massana de Bellas Artes de Barcelona para entrar en contacto con joyeros, escultores y pintores. A los 18 años montó su propio taller y desde entonces ha compaginado la labor de creación de sus joyas (que vende con los dibujos previos a su realización) con la gestión directa de su obra en su propio negocio.

Sin embargo, Aymat no es en absoluto un artista sedentario. Viajero incansable, observa y analiza las culturas que le interesan tomando nota de todo lo que le emocione o considere interesante como punto de partida para sus singulares creaciones. De ahí que siempre viaje con su bloc de notas, que utiliza tanto como diario de sus experiencias como de archivo de documentación y catálogo de sus nuevas colecciones.

«En realidad, sus viajes han llegado a convertirse en auténticos talleres de diseños, por una parte, y en destinos imprescindibles para hallar las piedras preciosas necesarias para realizar su trabajo, por otra. Àfrica, Asia y Sudamérica son algunos de los destinos habituales en los que el autor localiza la piedras en bruto que posteriormente él mismo tallará», señala en su número de mayo la revista Joyas, The Best sobre el arte de Txè Aymat, quien se mostró particularmente satisfecho del éxito que tuvieron sus joyas el pasado año en el Salón de Joyeros del Carrousel du Louvre de París.