Vicent Ferrer presentó ayer en Formentera un libro sobre la vida y el legado cultural de 'Pep Simon' (Josep Torres Costa), encargo del Institut d'Estudis Baleàrics. Un acto que tuvo lugar en la Mola, ya que aunque Torres nació en es Cap de Barbaria y emigró por dos veces a hacer las Américas (Cuba y Uruguay), pasó los últimos 50 años de su vida en la Mola, donde se consolidó como el gran cantador de Formentera; «hasta llegar a tener suficiente renombre como para que los cantadores ibicencos interpretaran obras suyas», indicó ayer su biógrafo.

La importancia de 'Pep Simon' dentro del mundo de la música «es muy grande, ya que desarrolló su actividad en todos los campos. Fabricaba instrumentos musicales, era ballador, cantador y compositor y, ya en la última parte de su vida, allá por los 80, sintonizó con otros movimientos que tenían como objetivo promocionar estos elementos propios de la cultura formentense, especialmente la Obra Cultural Balear, que le otorgó el premio de cultura popular en 1978», y que fue el precedente de la creación del premio 'Pep Simon' que se fue entregando anualmente hasta principios de este siglo.

La OCB, explicó Ferrer, elaboró en los años 80 un documental sobre su figura y, paralelamente, inició la recogida de sus obras escritas, que fueron publicadas después de su muerte. Con motivo de la presentación del libro, ayer se pasó en la Casa del Poble de la Mola el mismo documental, measterizado y en formato DVD que se incluye en el volumen.

El título de la obra de Ferrer hace referencia a dos mundos, «La Formentera tradicional, preindustrial, y la Formentera atávica, donde pervivían formas de comunicación y cultura que habían permanecido intocadas durante siglos», apuntó Ferrer, añadiendo que es importante ver como sus canciones reflejan muy bien este contraste de dos mundos y ello se aprecia en su actitud de rebeldía amable.