La primera edición de Estroncar el soroll vio la luz en 1996. Ahora, catorce años después, el prolífico Jean Serra publica una reedición de una obra en la que considera que «había demasiados errores que corregir». Esta noche, a las 20 horas, la sala de Cultura de Sa Nostra acoge la presentación de una obra centrada en los sonidos alienadores que invaden nuestra sociedad y que constituye el primero de tres libros, dos de los cuales están por llegar.
En este volumen se han aplicado las correcciones pertinentes y se ha ampliado con un breve conjunto de poemas titulado Temps de treva. «Me he quitado una espinita que tenía clavada», aseguró ayer Serra.
Se trata de una colección de las obras poéticas que Jean Serra ha seleccionado y que escribió en un período que transcurrió entre 1975 y 1988.
Ruidos que molestan
Según el autor, los sonidos que hoy en día deben ser eliminados son todos aquellos que alienan «como el de los los automóviles en las ciudades, el ruido de los aviones que transcurren sobre las viviendas en muchas partes del mundo y, sobre todo, el de las macrodiscotecas, donde nadie puede hablar con nadie». «Esta alienación no nos deja pensar por nosotros mismos», algo que Serra considera muy peligroso ya que «en el momento en el que una persona está alienada se puede hacer con ella lo que se quiere».
El autor de esta obra, ilustrada con la escultura de Rodin titulada Orfeo haciendo sonar su lira, considera que «antes, la gente que salía a escuchar música podía hablar con su acompañante. Hoy por hoy, en las macrodiscotecas eso es completamente imposible». Sin embargo, aunque Serra considera que el de estos espacios musicales es el ruido que más molesta, no puede negar que el 'ruido', en sentido metafórico, que más le molesta actualmente es «el de la mentira por parte de un sector de la clase política».