La autora de ‘Más que menos’, Marián Nicolás, ayer, junto a la redacción de Ultima Hora Ibiza y Formentera.

El día anterior a una actuación, Marián Nicolás reconoce que aún experimenta cierto nerviosismo. «Si no nos pasara esto no estaríamos en los escenarios», asegura la cantante y autora de Más que menos, que hoy se presenta en Can Ventosa a las 21,30 horas.
Monólogos escritos por ella misma en los que, pese a que hay tintes de ficción, siguen el hilo conductor de la biografía de la artista. «La he escrito yo y la ha supervisado Antonio Cantos, sin el cual no me hubiera atrevido a hacer algo así», explicaba ayer la cantante. Acompañada al piano por Víctor Gresely, Nicolás considera que «es un auténtico lujo que él también me haya apoyado en este proyecto».
Esta propuesta permaneció latente en el interior de la intérprete durante años. No fue hasta el pasado septiembre cuando, tras una cena con el director teatral Antonio Cantos, su ilusión comenzó a materializarse hasta convertirse en Más que menos. «Al meterte en tus adentros, llega un momento en el que la emoción te embarga y no puedes seguir, porque todos en la vida hemos pasado por momentos malos», comentaba ayer Marián Nicolás, que pese a esto asegura que el montaje discurre por una línea muy ligera. «Hay partes trágicas y partes muy graciosa pero está hecho de una forma en la que no me regodeo en el drama, sino que pasas un poco por encima, porque esa es mi actitud ante la vida», señalaba la cantante, que hacía hincapié en que el fin último de este montaje es entretener al público.
Regalo
El hecho de presentar este espectáculo precisamente hoy nace de la voluntad premeditada de Marián Nicolás de que este Más que menos sea «un regalo para los enamorados». La autora de este monólogo aderezado con canciones considera que el amor ha sido uno de los grandes motores de su vida. «El amor y el desamor, por supuesto, han marcado mi vida, así que consideré que el día 14 de febrero era un buen día para presentarlo».
Nicolás se define como «una enamorada de la vida, con sus penas y sus glorias». Este es el lema con el que ha sido concebido este montaje, que supone el principio de un proyecto llamado a crecer. «Si a la gente le gusta, nos gustaría hacer más representaciones y que, incluso, pudiera traspasar la línea del monólogo y convertirse en algo más», apuntó Nicolás.
«Un actor no puede hacer nada sin un director», aseguró Marián Nicolás, refiriéndose a Antonio Cantos. En este sentido, quiso resaltar que sin el ánimo y el apoyo del director teatral, no se hubiera atrevido a llevar este proyecto al escenario.


Escritora antes que actriz
Su impulso por escribir y plasmar en un papel sus sentimientos se remonta a su adolescencia. «No he sido nunca de escribir un diario pero existen ciertos estados de ánimo que sentía la necesidad de escribir».
Durante una etapa de su vida dejó de escribir, de profundizar en su interior pero ahora ha recuperado este ejercicio de introspección del que ha surgido el espectáculo que hoy se presenta en Can Ventosa.
«Soy un animal de instintos y los plasmo en un papel, a veces», explicó Nicolás ante la aparente arbitrariedad con la que surgen ciertas situaciones o sentimientos sobre los que finalmente relata algunas lineas.
Su debut como actriz sobre el escenario fue hace exactamente doce años.