Isidor Marí durante su actuación. A la derecha, el grupo Quin Delibat.

Los legados poéticos de Marià Villangómez (Eivissa, 1913 - 2002) y Bartomeu Rosselló-Pòrcel (Palma, 1913 - El Brull, 1938) se cruzaron el viernes en el Centre Artesà Tradicionàrius de Barcelona en un intenso homenaje, a medio camino entre el espectáculo musical y el recital poético.

La velada, organizada por Illencs pel Català, colectivo de jóvenes baleares establecidos en Catalunya, contó con el apoyo del Espai Mallorca de Barcelona y congregó a una veintena de grupos de música y escritores, que recordaron a los poetas durante más de dos horas. Los gastos del concierto se sufragaron con un campaña de micro mecenazgo en internet.

Los escritores Llucia Ramis y Martí Sales condujeron el acto a partir de un guión elaborado por Antoni-Lluís Trobat. «Un acto así sirve para hacer pedagogía en Catalunya sobre la realidad de las Islas, ya que en realidad hay un desconocimiento muy grande y cargado de tópicos», declaró el coordinador, y afirmó que «el valor de este homenaje es demostrar que aún somos una sociedad fuerte y debería darnos vergüenza que seamos nosotros los que realizamos un trabajo que corresponde a las instituciones».

Llucia Ramis, que se estrenaba como presentadora en una gala, comentó que «da rabia que Salvador Espriu merezca un Any Espriu con un gran presupuesto y Rosselló-Pòrcel y Villangómez no lo tengan, no veo la diferencia».

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