El saxofonista Dani Nel·lo, impresionó al público con buenas dosis de trepidantes ritmos más propios del rythm & blues, el swing, el rock and roll y el honk que del jazz. | Toni Escobar

El festival de jazz arrancó en la noche del jueves con Mambo Jambo, que hizo buenas las palabras de Miquel Prats ‘Botja’ en la presentación del certamen, cuando dijo que «arderían las murallas». Y así fue, pues el cuarteto catalán, liderado por el saxofonista Dani Nel·lo, impresionó al público con buenas dosis de trepidantes ritmos más propios del rythm & blues, el swing, el rock and roll y el honk que del jazz.

El cuarteto, completado por el guitarrista Mario Cobo, el contrabajista Iván Kovacevic y el baterista Antón Jarl, desgranó los temas de sus dos trabajos editados con gran solvencia. Una parte del público se mantuvo en sus butacas, aunque otra parte de los asistentes, los más jóvenes, se inclinaran por disfrutar del concierto bailando, ante la falta de sillas y la pegadiza propuesta de los Mambo Jambo.

Previamente, la Eivissa Jazz Big Band, que contó con la colaboración de los vocalistas Eva Cano y Nacho Lezcano, dio muestras de la evolución de su repertorio bajo la batuta de Santiago Pérez, quien dirige la formación desde hace unos meses. Durante poco más de una hora, se sucedieron piezas de Gershwin, Dizzy Gillespie, Tom Jobim o Cole Porter, ejecutados de manera exquisita.

Ayer fue el momento de la Jove Big Band, de Muriel Grossmann Quartet y de la cantante madrileña Susana Sheiman con su propuesta ‘Open Gate’.

El festival Eivissa Jazz culminará hoy con su tercera y última velada, donde actuarán Treejay, Norberto Rodríguez y Perico Sambeat.