El otro día me llamó por teléfono un ordenador para venderme un producto, no sé cuál porque enseguida colgué. Está claro que la inteligencia artificial (IA) está yendo más rápido que la inteligencia humana, especialmente la de los legisladores, que son lo que tienen que crear leyes para evitar malas praxis comerciales. No me quiero imaginar un ejército de algoritmos programados con IA robando datos, como teléfonos de empresas y autónomos publicados en páginas web, haciendo millones de llamadas diarias para ofrecer productos y servicios. Y para los que piensen que ya hay una normativa para evitar esto, no lo están entendiendo, porque no hablo de realizar una venta telefónica «legal», me refiero a los que pasan de las regulaciones amparándose en la clandestinidad, como el «spam» de los correos electrónicos, por lo que se tendrían que establecer grandes sanciones para los que se beneficien de estas prácticas y medidas «técnicas» para evitar que se puedan realizar llamadas telefónicas masivas.
La inteligencia artificial en el marketing digital
14/07/23 10:20
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